El cuidado de los bienes patrimoniales de una ciudad es fundamental para preservar su historia y cultura.
En el caso del parque Sucre en la ciudad de Riobamba, la pérdida del brazo de uno de los querubines de la pileta de Neptuno es un recordatorio alarmante de la falta de atención y seguridad que se le brinda a estos importantes elementos.
El municipio tiene la responsabilidad de proteger y conservar estas obras de arte, pero su aparente indiferencia ante este incidente es preocupante.
La ausencia de guardianía y seguridad para estas esculturas deja expuestos los bienes patrimoniales a actos de vandalismo y robo, poniendo en peligro su integridad y valor histórico.
Es imperativo que las autoridades municipales implementen medidas efectivas para proteger estos activos culturales, como aumentar la vigilancia en el área, instalar sistemas de seguridad y realizar mantenimiento regular.
Además, es necesario involucrar a la comunidad en la protección y preservación de estos bienes, fomentando el sentido de pertenencia y responsabilidad hacia su cuidado. Esto puede lograrse a través de programas educativos, campañas de concientización y la participación activa de los ciudadanos en la vigilancia y denuncia de cualquier actividad sospechosa.
La pérdida del brazo del querubín no solo representa la pérdida de una parte de la historia de Riobamba, sino también una llamada de atención sobre la importancia de valorar y proteger nuestros bienes patrimoniales. Es fundamental que el municipio asuma su responsabilidad en la conservación de estas obras de arte para las generaciones futuras.