VIH SIDA, su impacto en la salud de Ecuador y el mundo

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Desde su aparición, el SIDA/VIH han dejado profundas huellas en Ecuador y el mundo, cambiando vidas y sociedades.

SIDA/VIH, su impacto en la salud de Ecuador y el mundo.
SIDA/VIH, su impacto en la salud de Ecuador y el mundo. http://54.163.33.106

El impacto del SIDA/VIH en Ecuador y el mundo ha trascendido la parte de salud, abarcando también aspectos sociales, emocionales y educativos a lo largo de la historia.

El SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida) fue identificado oficialmente en 1981, cuando médicos en Estados Unidos reportaron un aumento inusual de casos de enfermedades raras, como neumonía por Pneumocystis y sarcoma de Kaposi, en hombres jóvenes previamente sanos.

Inicialmente, la comunidad médica desconocía las causas de este fenómeno, pero en 1983, investigadores lograron aislar el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), responsable de la enfermedad.

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Durante las décadas de los 80 y 90, el SIDA tuvo un impacto devastador, cobrando millones de vidas en todo el mundo.

La falta de información, la estigmatización hacia grupos vulnerables (como hombres homosexuales, usuarios de drogas inyectables y trabajadores sexuales) y la limitada disponibilidad de tratamientos eficaces contribuyeron a la expansión de la epidemia.

Íconos culturales como el cantante Freddie Mercury y el activista Ryan White ayudaron a visibilizar la enfermedad y desmantelar prejuicios.

En 1996, la introducción de la terapia antirretroviral combinada marcó un antes y un después, transformando el VIH de una sentencia de muerte a una condición crónica manejable.

Sin embargo, el acceso desigual a estos tratamientos ha sido un desafío continuo, especialmente en países de bajos ingresos.

El SIDA ha marcado profundamente la historia al cambiar paradigmas sobre la salud global, los derechos humanos y la cooperación científica entre países.

La respuesta internacional, que ha incluido la creación de instituciones especializadas como ONUSIDA, ha sido fundamental para mitigar el impacto de la epidemia, fomentar la investigación médica y promover la educación masiva sobre la prevención y el tratamiento del VIH/SIDA.

Desafíos médicos y emocionales del SIDA

Dra. Anita Inca explicó los desafíos emocionales de los pacientes del SIDA.
Dra. Anita Inca explicó los desafíos emocionales de los pacientes del SIDA. http://54.163.33.106

La lucha contra el SIDA no solo implica un reto médico, sino también un desafío emocional profundo para quienes enfrentan esta enfermedad.

La Dra. Anita Inca, médica con experiencia en el manejo de pacientes con VIH/SIDA, detalla los principales obstáculos que estos deben superar en ambas dimensiones.

Yo considero que los principales desafíos médicos son el acceso limitado a diagnósticos tempranos, la falta de continuidad en los tratamientos debido a problemas logísticos o económicos, y la coexistencia de otras enfermedades crónicas que complican su manejo

Dra. Anita Inca

Estas barreras pueden poner en riesgo la salud de los pacientes y dificultar el control efectivo de la enfermedad, aumentando el riesgo de progresión al SIDA y complicaciones graves.

Sin embargo, los desafíos van más allá del aspecto físico.

Desde el punto de vista emocional, pueden enfrentar el impacto del propio diagnóstico, el miedo al rechazo social, la ansiedad por el futuro, y en muchos casos, la depresión o la soledad

Estas afecciones mentales y emocionales pueden ser tan debilitantes como la propia enfermedad, afectando la calidad de vida y la adherencia al tratamiento.

La Dra. Inca destacó la importancia de un enfoque integral en el tratamiento del VIH/SIDA, que no solo atienda las necesidades médicas, sino también las emocionales.

El acceso a apoyo psicológico, redes de acompañamiento y programas educativos es crucial para ayudar a los pacientes a enfrentar estos desafíos con mayor fortaleza.

En el Día Mundial del SIDA, recordar estos aspectos es fundamental para generar conciencia sobre la complejidad de esta enfermedad y la importancia de un abordaje integral para mejorar la vida de quienes la enfrentan.

El VIH: realidades, desafíos y esperanza en Ecuador

El VIH: realidades, desafíos y esperanza en Ecuador.
El VIH: realidades, desafíos y esperanza en Ecuador. http://54.163.33.106

A pesar de los avances en el tratamiento y la conciencia sobre la prevención, se estima que en Ecuador han muerto 17.574 personas por sida entre 1984 y 2016.

Un testimonio anónimo, muestra la cara humana de la epidemia, sus repercusiones emocionales y la lucha constante por superar tanto el miedo como la discriminación.

David, (nombre protegido), un joven de 26 años, nunca imaginó que un solo error marcaría su vida para siempre. Diagnosticado con VIH y SIDA hace un año, David describió su experiencia como un proceso lleno de dolor, no solo físico, sino emocional.

Siempre usaba protección, pero en una ocasión, la calentura del momento me hizo dejar de lado las precauciones

Testimonio anónimo

La situación ocurrió a través de una aplicación de citas, donde encontró a una persona que prefería tener relaciones sexuales sin protección.

Estúpidamente me dejé llevar. Tuvimos relaciones sin condón, no fue una buena experiencia

Dos meses después, comenzaron los síntomas: fiebres, manchas en la piel, pérdida de peso y cabello. Fue entonces cuando, a los tres meses, se sometió a una prueba clínica que dio positivo en VIH y sífilis.

“Me sentía impuro, asqueroso”, confesó. Sin embargo, el tratamiento con retrovirales, iniciado a los 9 meses, trajo un respiro. “A los tres meses ya estaba indetectable. Mejoré, pero siento que nunca me volveré a sentir como antes”, añadió.

El camino hacia la aceptación ha sido complicado. A pesar de los avances médicos, David explicó que el dolor emocional persiste. “La gente sigue viendo al VIH como una sentencia de muerte, y es difícil vivir con ese estigma”, aseguró.

Desde una perspectiva familiar, el VIH no solo impacta al paciente, sino que también genera miedo, preocupación y angustia en quienes lo rodean, afectando profundamente el entorno emocional.

Tratamiento para conllevar el SIDA

Según una investigación del medio nacional «El Comercio», en Ecuador, 48 782 personas viven con VIH y de estas, 88% reciben tratamiento antirretroviral.

El tratamiento antirretroviral (TAR) consiste en una serie de medicamentos que se deben tomar diariamente para controlar la infección por VIH.

Su principal función es evitar que el VIH se replique, lo cual disminuye la carga viral en el organismo.

Esto no solo ayuda a las personas infectadas a vivir más tiempo y de manera más saludable, sino que también reduce el riesgo de transmitir el virus a otras personas.

El TAR debe ser seguido de manera continua y de por vida, ya que no existe una cura para el VIH, es fundamental comenzar el tratamiento lo más pronto posible, especialmente si la persona se encuentra en las primeras etapas de la infección o presenta síntomas relacionados con el SIDA.

El tratamiento antirretroviral no solo mejora la salud general de las personas con VIH, sino que también permite llevar una vida sexual segura.

Cuando una persona con VIH toma el tratamiento correctamente y logra alcanzar una carga viral indetectable, el riesgo de transmitir el virus a su pareja es prácticamente nulo.

Este concepto se conoce como «Indetectable = Intransmisible» (I=I), lo que significa que si la carga viral es indetectable, no hay posibilidad de transmisión del VIH a través de relaciones sexuales sin protección.

Además, el uso de condones u otros métodos de protección sigue siendo una forma efectiva de prevenir la transmisión de VIH y otras infecciones de transmisión sexual.ƍ

Es decir, las personas con VIH pueden mantener su vida sexual de manera normal, siempre y cuando sigan el tratamiento antirretroviral de manera adecuada y reciban atención médica regular.

Un llamado a la conciencia y empatía colectiva

Un llamado a la conciencia y empatía colectiva.
Un llamado a la conciencia y empatía colectiva. http://54.163.33.106

El VIH (Virus de la Inmunodeficiencia Humana) sigue siendo un reto global, pero también es un tema que debe abordarse desde la comprensión y la empatía, no solo desde la prevención y el tratamiento médico.

A pesar de los avances científicos y las estrategias implementadas, este virus continúa afectando a millones de personas en todo el mundo, y su diagnóstico sigue siendo un desafío en muchos aspectos, no solo de salud, sino también emocionales y sociales.

Mariana de Jesús Jara Zúñiga, médica especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, hace un llamado claro y urgente a la conciencia colectiva sobre el VIH.

Mariana de Jesús Jara Zúñiga, médica especialista en Medicina Familiar y Comunitaria.
Mariana de Jesús Jara Zúñiga, médica especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. http://54.163.33.106

Asegura que, aunque el diagnóstico de esta enfermedad ahora es mucho más sencillo gracias a la disponibilidad de pruebas rápidas y accesibles en todos los niveles de atención, la discriminación y el estigma hacia las personas que viven con el virus siguen siendo un problema profundo y persistente.

El VIH es una infección prevenible, pero sigue siendo una causa importante de muertes en el mundo. El diagnóstico es más sencillo hoy en día, y las personas pueden acceder a tratamiento gratuito y oportuno en cualquier centro de salud. Sin embargo, a pesar de estos avances, el estigma que rodea al VIH puede ser devastador

El estigma no solo afecta la vida social y emocional de las personas, sino que también aumenta la probabilidad de trastornos de salud mental graves.

Según la Dra. Jara, las personas diagnosticadas con VIH tienen el doble de probabilidad de enfrentar depresión severa, lo que, en algunos casos, puede llevar a pensamientos suicidas.

Este es un factor crítico que hace necesario un enfoque integral para el tratamiento y el cuidado de quienes viven con el virus.
Tratamiento.

La Dra. Jara subrayó que la atención médica y la busqueda de información sobre el tema juegan un rol crucial en la identificación temprana y el manejo del VIH.

Según la Dra. Jara, con el tratamiento adecuado, las personas pueden llevar una vida de calidad. Mediante la educación y el apoyo emocional, quienes acceden al tratamiento tienen la posibilidad de mantener una vida activa y satisfactoria.

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