Testimonios familias Riobamba: “¡Quiero el perdón de mi hija para poder morir en paz!”, sostiene María Caguana Criollo, de 62 años de edad, quien hace 45 años dejó abandonada a su hija de cinco meses de edad en un hotel de esta ciudad de Riobamba.
Caso.
El hecho ocurrió en abril del año 1976, y María cuenta que, en esa época, existió un gran paro y le tocó llegar caminando hasta la “Sultana”, y las cosas que traía dejó encargando en una población cercana; ella, con apenas 15 años de edad, junto a un compañero, se instalaron en un hotel por el sector del barrio La Estación, “pero no me acuerdo el nombre del hotel”. Al siguiente día ya tenía que regresar por las cosas que dejamos encargando, pero optó por dejar a su hija de cinco meses de edad en la habitación del hotel, creyendo que no se iba a demorar mucho, pero cuando se dio cuenta de la realidad ya era muy tarde. “Recibí un mal consejo de mi compañero, quien me dijo que ya no regresé por mi hija, porque me van a meter presa por haberle abandonado.
Como era muchacha tuve miedo y ya no regresé por mi hija”, comentó afligida. Así, María Caguana optó por cambiar de ciudad y prefirió irse para Ambato y dejó a su suerte a su hija, que nació el 14 de agosto de 1976. No sabe cómo se llama la niña, ni cuenta con alguna fotografía de referencia para poder identificarla, de paso que no sabe ni el nombre de la niña, pues, no estaba registrada su identidad. Doña María está arrepentida por lo hecho, “he estado llorando por mi hija, la conciencia no me deja tranquila.
Estoy haciendo mi último esfuerzo, quiero encontrarle, pedirle perdón por todo el daño que le causé y así poder morir en paz”. Han sido muchos años de sufrimiento y trató de buscar paz siendo parte de una Iglesia Evangélica (…) en una ocasión estaba llorando por mi hija, y el pastor dice: ‘hay una hermana que llora por su hija, y piensa que está muerta, pero no está muerta’, a partir de ese momento me entusiasmé y emprendí la búsqueda de mi niña. Vengo con el fin de rectificar el grave error que cometí, quiero decirle a mi hija que tiene una mamá y siete hermanos”, manifestó. María Caguana al momento está radicada en Santo Domingo de los Tsáchilas y espera noticias de su amada hija, a la que no olvida…