Testimonios de Riobamba: Arturo Llamba y Elsa Quinllín llevan 35 años de casados, los ciudadanos se trasladan desde el vecino cantón de Guano hasta la ciudad de Riobamba para poder ganarse la vida vendiendo maduros con queso y reciclando cartón de los recolectores de basura. La pareja de avanzada edad se cuidan el uno al otra y todos los días parten desde su hogar con el temor a contagiarse con el virus del Covid 19.
Testimonios. Arturo Llamba manifestó que ellos son de la parroquia de San Isidro perteneciente al cantón Guano, viven solos en una casa arrendada, “verá señorita por la necesidad a veces así nos toca ella viene a vender sus maduritos yo vengo a reciclar, venimos todos los días de allá del campo”, añadió que el coche en el que comercializan los maduros dejan por el mismo sitio de venta pagando en un garaje, “nos saben cobrar como 15 dólares al mes”, asimismo que luego de un fuerte día de labores se dirigen hasta su casa a las 17:00 h a descansar.
Labor. El ciudadano tiene 60 años, y su esposa igual, “cuando tienen voluntad me dan, a veces ando a pedir en algunos locales y reciclando en los tachos”, al día el ciudadano logra conseguir 3 dólares, “yo junto hago una carga y me voy a dejar en las recicladoras por la salida a Cerro Negro, otra queda por el Parque del Diablo”.
Covid 19. “Dando gracias a nuestro padre Dios, no nos ha dado la enfermedad, eso es lo más importante que a veces uno se pide por la salud de nosotros y por cualquier persona, bendito Dios hasta el momento no, eso que ando en los tachos de la basura”. Los esposos no tienen conocimiento de cuándo les toca la vacuna debido a que no pueden manejar un celular para poder saber. Por su parte Elsa Quinllín de Llamba dijo. “un año que salí después de la cuarentena y gracias a Diosito no nos ha pasado nada, la mascarilla no me saco en ningún momento”, señaló además que antes trabajaban en el campo pero que hoy en día por su edad y la crisis ya no lo pueden hacer, no obstante, en el día gana 5 dólares, “ahora no vale, no se vende nada Diosito lindo”. Los dos se apoyan para salir adelante.