Por varios años han colocado las luces por motivo de la Navidad en el parque Sucre, por una oportunidad esta actividad la hicieron en el parque 21 de Abril. Ahora en el parque Sucre han cubierto la fuente de Neptuno con un gran árbol de Navidad. ¿Tradición festiva o amenaza para el patrimonio histórico?
Pues, a quién no le emociona un cambio que involucra las luces en un parque céntrico, la verdad es que a muchos; sin embargo, hay que considerar los contextos y cuestionar actividades que parecieran inofensivas, que al final del día tienen un impacto en el imaginario de las personas.
Se sabía que el permiso para colocar esta infraestructura lo habilitaban si colocaban colchonetas en ciertos puntos para evitar el daño del complejo escultórico, aunque es evidente esa medida, quedan otras cuestiones para considerar.
A saber
La característica del parque Sucre, es la pileta que tiene como centro el dios Neptuno acompañado por tritones, y más que el valor mitológico, es el significado que tiene para la ciudad, puesto que representa la llegada del agua potable a la ciudad en el año de 1913, y que además existen únicamente seis en todo el mundo, uno esta en nuestra ciudad.
Desde una mirada técnica de preservación, Karol Vizcaíno, directora técnica zonal Nº3 del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), explicó que “lo que podemos observar a priori, con la colocación de este árbol de Navidad, es que no se ha considerado la permanencia de esta escultura, porque forma parte principal del parque y tiene un lugar específico, que no se le puede ocultar ni se le puede quitar ese significado y esa prevalencia” y enfatizó que no se oponen, pero deben “analizar en dónde y cómo se van a colocar estos elementos, de tal forma que su colocación no afecte de ninguna manera a los bienes patrimoniales”.
En tanto, en el parque el acceso está limitado porque afinan detalles, mientras el parque luce vacío, sus usuales concurrentes no están ahí.