¿Existe una equidad de género visible al momento de analizar el ejercicio público o político?, ¿en el país la sociedad se encuentra lista para que ciertos sectores vulnerables se tomen la escena pública? En Ecuador se generaron ciertos cambios para dar más visibilidad y participación a las mujeres y ser elegidas en democracia; así, es importante recalcar que en 1929 las mujeres fueron reconocidas como ciudadanas, dándoles, así, el derecho de elegir y ser elegidas para dignidades públicas, ser autoridades; pero, históricamente, la participación de las mujeres ha sido relegada por la herencia de un pensamiento que considera que la escena pública es, más bien, para los hombres, legitimado con el supuesto concepto de que la vida privada es mejor para las mujeres. A pesar del paso del tiempo, de los avances en la construcción de política pública enfocada en género, la violencia política hacia las mujeres persiste, y uno de los más recientes fue la agresión por parte de Diego Ordóñez, actual asesor presidencial, hacia la asambleísta de Unes, Mónica Palacios. Así, la activista por los derechos de las mujeres y animalista Estefanía Camelos otorgó su punto de vista hacia el papel de la mujer como funcionaria pública, y lo que ella haría si llegara a ejercer el poder. “Por las mujeres” si fuera autoridad.
¿Qué opina del ejercicio político a nivel nacional?
En realidad yo pienso que, desde un inicio, se ha perdido el significado por el que se ha creado esta forma de ordenarnos como sociedad. ¿Quiénes llegan a puestos políticos?, ya sea de elección popular, son quienes no están conectados con la ciudadanía; es evidente que no están preparados, ni tienen un papel cercano con la ciudadanía. Por lo tanto, todo lo que generan no están conectados con las necesidades de la gente. Por otro lado, hay una total desobligación de la ciudadanía en involucrarse, en exigir que se hagan las cosas con nuestros recursos, que se deben hacer. Desde un inicio todo estuvo muy mal concebido, y por eso pasa lo de ahora. El país está inmerso, igual la corrupción es tan evidente y no pasa nada. Vemos instituciones públicas que no cumplen su papel. Hemos visto como se desarrolla una inestabilidad al respecto.
¿Considera Usted que se tolera, en gran medida, a la corrupción en el Ecuador?
Sí, y esto se debe a que no pensamos en colectivo. No tenemos empatía hacia los demás. No nos gusta asociarnos para construir algo, estamos esperando que alguien más lo haga. No vemos que alguien se esté organizando para reclamar, y los que se organizan para reclamar también son corruptos; entonces, es un círculo vicioso en el que quienes cometen tal vez corrupción hacen algún acuerdo y no pasa nada. Hay estas veedurías, que se suponen que son un instrumento para involucrar a la ciudadanía en los procesos. Es evidente que no están funcionando los mecanismos de participación ciudadana, por un lado; y por otro es difícil encontrar un lugar sin corrupción, sin pensamientos político-partidistas; pero quienes hacen veeduría y la hacen bien luego son perseguidos políticos, por eso la gente ya solo piensa en su bienestar y deja de involucrarse.
¿Se han apropiado del discurso feminista para alcanzar votos?
Esto es totalmente cierto. Se apropian de los discursos porque ven lo que está de “moda”, ven lo que la gente busca. Buscan agradar al público y se apropian de estos discursos sin haber hecho nada al respecto. Si una persona que llega a candidatizarse y no ha trabajado en esos temas antes de ser candidato o candidata no esperemos que lo haga estando en esos espacios, y eso nos ha pasado. Candidatos a concejales, a la Alcaldía han hablado de ambiente, los animales, de las mujeres, muchos hablaron de la fauna urbana, pero viendo el tiempo no hicieron mucho, quizás algunos donaron algo, ayudaron con algo.
Si entrara a ser autoridad, ¿qué haría dentro de la función pública?
Me han ofrecido el ser candidata por elección popular, pero yo creo que es una responsabilidad muy grande —y hay que ser sincero— cuando uno no está lista para esos cargos, honestamente, se dice que no. Sinceramente, en la experiencia que tengo por ser activista solo se pueden lograr cambios cuando se está dentro. Me importan muchos temas, justo estoy estudiando una maestría en gerencia en emprendimientos familiares. Riobamba debe avanzar en el tema productivo, porque tenemos mucho que explotar. Me interesan mucho los animales, y se puede hacer mucho más por ellos. Yo creo que falta mucho para conseguir estos nuevos espacios. Muchos hablan de un desarrollo sostenible, pero, a pesar de estar en una crisis climática, del discurso no han pasado. Si tuviera la oportunidad sería difícil, ya que me importan muchos temas. Creo que Riobamba necesita avanzar en el tema económico y social
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