Política es para servir y no servirse: El cambio de camiseta a nivel político se puede considerar como un cinismo, y hay casos a nivel local, provincial y nacional que, en el momento oportuno, se une al mejor postor, y esto está sucediendo en la actualidad, pero, por el bien del país, hay que cambiar esta situación, dijo André Romero Fernández.
¿Considera que hay cinismo en la política?
Hay que iniciar indicando el objetivo que tiene la política, y personalmente comparto con numerosas personas ilustres que han pasado por la política en la ciudad de Riobamba, la provincia de Chimborazo y el país; hay que entender que la política es el arte de servir al pueblo, lamentablemente, en los últimos años no, hemos visto el cumplimiento de esta finalidad social.
¿Qué sucede en la actualidad a nivel político?
Ahora lo que queremos es llegar a un puesto de elección popular para satisfacer primero las necesidades personales y, segundo, acomodar bien a la familia, a los allegados, éste es un mal endémico que tenemos que erradicar. Nos hemos servido de la política en vez de servir.
En la actualidad vemos personas que se han cambiado de partidos políticos, políticos que han iniciado con una línea ideológica y con una camiseta que le entregó para un puesto político; no podemos hacernos los ciegos, el apoyo que está dando el exprefecto de la provincia de Chimborazo al candidato presidencial Lasso, sin desmerecer a ninguno de los candidatos, tenemos que recordar de dónde vienen el exprefecto, porque fue elegido Pachakutik y luego se formó su propio movimiento Minga, y estuvo con la Revolución Ciudadana.
Esto es un cinismo político porque se aprovecha del momento y de la coyuntura electoral para ponerse a disposición del que esté mandando, eso no es lo mejor en democracia.
¿Y qué consecuencia trae esta situación?
Esto no favorece, primero, a los ideales de toda la colectividad que está de adherente a un partido político, porque utiliza a su gente que, generalmente, es campesina, a la que convence con estos engaños de que un rato puede estar en el un lado y en otro rato se hace al mejor postor, eso también influye en la sociedad, en la nueva política de los jóvenes, porque naturalizamos y pensamos que es normal, cuando no es así, no se puede estar de partido en partido, haciéndose al mejor postor, sino que tiene que servir al pueblo desde el momento que uno opta por la política, es por eso que afecta, porque la nueva generación de políticos jóvenes, que están queriendo incursionar en la política y ven como normal esta situación, se normaliza y siempre se va en busca del mejor postor, esto influye en las decisiones políticas y en las políticas públicas a nivel seccional, regional y a nivel nacional, entonces, afecta en la toma decisiones, no podemos ser esquivos, ni tapar el sol con un dedo; y no solo es el caso del exprefecto de Chimborazo sino que vemos otros casos a nivel nacional, como la situación del candidato Xavier Hervas, él estuvo como parte del gobierno de Rafael Correa, ahora, obviamente, está apoyando al candidato Guillermo Lasso M., y, de igual manera, hay personas que han estado antes con Lasso y que ahora están con el candidato Andrés Arauz G.
¿Estos cambios han hecho que exista la presencia de numerosos movimientos políticos?
Todos tenemos el derecho democrático de elegir y ser elegidos, pero la presencia de 16 binomios no es saludable para el país, que confundamos a la ciudadanía con tantos candidatos y tantas propuestas; nos estamos dando cuenta que este ejercicio democrático se está volviendo un ejercicio personal, para satisfacer primero el ego de cada candidato y, segundo, tratar de satisfacer su parte económica, porque la política últimamente, desde la época de Correa hasta la actualidad, se ha venido naturalizando todos estos actos de corrupción que desfavorecen a las tomas de decisiones en toda la ciudadanía, que son los mandantes de cada gobernador; entonces, con esto naturalizamos la corrupción y pensamos que está bien, llegan al poder, se llenan los bolsillos y perdemos el fin de la política que es el servir a la sociedad y no servirse de ella para beneficio particular.
¿Será necesario formar una nueva generación del líderes con una nueva visión para cambiar esta situación en lo político?
Es imprescindible el tema de la educación política y ésta surge con los conversatorios, con debates, con escuelas políticas que se realizan desde los colegios y desde las universidades que puedan nuestros jóvenes acceder a este tipo de eventos y democratizar todos los pensamientos, los ideales y las propuestas que se tengan.