Desde la Municipalidad de Riobamba, en la administración anterior, se hizo la compra del terreno donde funcionaría la Plaza de rastro, además de una expropiación de unas siete hectáreas en San Juan.
Caso. Marco Portalanza, concejal que preside la Comisión de Obras Públicas, comentó que este lugar ya cuenta con algunos diseños. “Estaba previsto en el presupuesto de este año destinar una partida presupuestaria de 800.000 dólares para la ejecución de la obra”, puntualizó el edil, quien explicó que en el pleno del Concejo se hizo un llamado a que se priorice la tarea, que es necesaria tomando en cuenta que la Plaza de rastro de Calpi solo era provisional, porque cuando funciona (hoy no por la pandemia) causa inconvenientes a los usuarios.
Cambios. Esa es la razón por la que se espera realizar una reforma al presupuesto, de tal manera de que estos 800.000 dólares, que si bien constan en el presupuesto, hoy por hoy no se tienen.
Se esperaba que con la devolución del IVA por parte del SRI se contaría con estos recursos, pero este proceso se ha demorado, por lo que es necesario realizar esta reestructuración; es decir, para cumplir con la primera fase se requiere 1’100.000 dólares. El pleno apoyó el pedido de priorizar este trabajo.
Colaboración. Se hizo un pedido de colaboración al Ministerio de Obras Públicas para la remoción de tierras de una pendiente que tiene el terreno de la plaza.
Remoción de tierras. “En el lugar existe una la- dera. Esto implica que se tiene que hacer un movi- miento de tierras bastante grande para poder ejecutar las plataformas”, comentó el concejal Portalanza.
Realidad. El costo de estos trabajos eran de aproximadamente 300.000 dólares en ejecución de obra. “Ya se tenía todo avanzado, pero, llegó la pandemia”, dijo el edil. Hoy se ha retomado este pedido.