Los padres tienen que ser muy responsables con sus hijos, deben dar el tiempo necesario y crear alternativas para su entretenimiento en la casa, dijo Patricia Concha Cantos.
¿Qué estrategias se deberían tomar para que los niños dejen por un tiempo el asunto virtual en la temporada de vacaciones?
En primera instancia el Ministerio de Educación tomó la decisión de establecer la educación virtual, personalmente lo vi muy beneficioso, porque los padres tenían la oportunidad de estar junto a sus hijos y podían controlar las tareas escolares. Pero al final del año vemos que ha sido desfavorable, porque a pesar de que los padres estaban en sus casas no controlaban el tiempo de utilización de la computadora, entonces, los niños recibían clases sin guía y hacían sus tareas sin orientación, muchas veces como no tenía control, los niños veían programas nocivos.
¿Qué sucede a los niños, si no existe control de los padres en el uso adecuado de la computadora?
Si ven programas nocivos ocasionan daños muy severos a los niños y de todas las personas, porque se hacen adictos, por eso, en vez de considerar una ayuda ocasiona un perjuicio al niño.
¿Cómo solucionar?
Hay que tomar las estrategias para que las cosas funcionen muy bien, y todo cambio es bueno, si se lo hace de la manera correcta. Los primeros que deben estar dispuestos al cambio son los padres, pero si ellos no están dispuestos no van a lograr ninguna transformación en favor de sus hijos y cuando las cosas ya están mal encaminadas culpan a las personas que están a cargo de los niños, como empleadas, abuelos y tíos.
¿La formación está en los padres de familia?
Los padres tienen que educar con el ejemplo, eso es lo que cuenta, uno tiene que ser coherente, con lo que habla, con lo que piensa y con lo que hace.
¿Cuál es la primera regla para cambiar las cosas en favor del niño?
Que los padres se capaciten y que estén dispuestos a seguir sus indicaciones, recordemos que el internet, sabiendo utilizar, es una maravilla.
La capacitación para ser buenos padres tiene que nacer del corazón de las personas porque eso permitirá mejorar la calidad de vida de las familias.
Todo lo que se impone, jamás dará buenos resultados, ni en los adultos, peor en los niños; pero si nace del corazón de los padres que aspiran tener una calidad de vida, las cosas son diferentes. La vida es una constante capacitación.
¿Hay que imponer mucha disciplina a los niños para que vayan por el camino correcto?
Debemos imponer disciplina, pero con amor, el niño no acepta, ni cambia si tratamos de hacer mediante gritos o maltratos físicos, porque a nadie le gusta ser maltratado. Si no hay reglas claras en la casa por parte de los padres, los niños seguirán haciendo lo que ellos quieren.
¿Urge establecer horarios para las tareas?
Hay que poner horarios los mismos que deben ser respetados, porque hay que saber aprovechar el tiempo. Debemos enseñar a saludar a los hijos para que aprendan, si no le enseñamos valores, ellos tampoco enseñarán a sus hijos. El saludo a los padres es una obligación.
¿Los hijos aprenden de la enseñanza de los padres de familia?
Si no estamos bien en la familia, imposible que podamos tener una buena sociedad, debemos tener una buena comunicación con los hijos, y si no logramos eso, el futuro de la sociedad es incierta.
¿Qué hacer para que el niño deje a un lado la computadora y haga otras actividades?
Hay que organizar bien para que utilice un cierto momento y no todo el tiempo, porque es necesario que realicen otras actividades que tienen que ver con la lectura, la pintura, la música que son alternativas de entretenimiento para los niños y niñas que están gozando de sus vacaciones estudiantiles, pero estas acciones deben incentivar a los padres, si ellos no hacen nada, los niños seguirán en la computadora o en la televisión, indudablemente, que son herramientas muy buenas, pero sabiendo utilizar adecuadamente, caso contrario, mejor daña la mente de los niños.
¿El niño está dispuesto a cambiar y hacer cosas interesantes en la vida?
Los niños son adaptables, a ellos les gusta los cambios, los que no quieren una verdadera transformación son los padres, en cambio el niño, acepta todo.