En varias ocasiones ocultan casos de hombres violentados, por ello, en el marco de la violencia que viven los ecuatorianos en la actualidad, decidimos adentrarnos en el caso de la que es ejercida contra los hombres, por parte de sus parejas mujeres.
Dicha temática es abordada en busca de dirigirnos hacia una sociedad de respeto a los derechos del ser humano, sin distinciones. Dejamos en claro que, de ninguna manera, se busca desvirtuar la lucha aguerrida de las mujeres en contra de la violencia ejercida por parte de los hombres; por el contrario es digno de reconocimiento… En esta ocasión, conocimos los criterios del psicorehabilitador y terapeuta familiar Issac Salazar.
¿Los hombres reciben violencia de sus parejas?
Sí. La violencia puede ser ejercida de parte de la mujer, o también por parte de otro hombre, esto en caso de las relaciones homosexuales.
¿Ha tratado hombres violentados por sus parejas?
Sí; sin embargo, son casos mínimos. En ocasiones, no solo producto de la violencia, sino de fenómenos como la depresión. Esta respuesta la hago, entendiendo la violencia en contra de los hombres, en referencia a los niños, adolescentes, jóvenes, adultos y adultos mayores. He tratado desde la sintomatología, a la base fundamental. A más del trato a la víctima, involucro también al agresor, para que reciba ayuda, y así el ambiente no se vuelva violento.
¿Qué tipo de violencia reciben?
Lo que más he podido conocer es el de tipo psicológico. En el caso de los adolescentes se observa un trato violento a nivel psicológico de parte de su familia, amigos u otros adolescentes. La situación psicológica es invisible; y para que se vuelva visible debe haber una manifestación a nivel conductual o también en el cuerpo, esto en la relación con la otra persona.
¿Qué afectaciones psicológicas causa la violencia ejercida al hombre por parte de su pareja?
Provoca impotencia en las relaciones cotidianas; también en el desempeño laboral, estudiantil y sexual. Además, un sentimiento de rechazo, el cual, en ocasiones, ya viene cargado desde su etapa infantil. Así también, un pensamiento de invalidación de sí mismo; y lo peor, en ocasiones, aparecen pensamientos suicidas.
En el hombre, al dar a conocer su situación, ¿existe vergüenza?
Más que vergüenza, aparece la negación. Dicen, yo mismo tengo la culpa, ya que se lo ha interiorizado. Dicen también, yo tengo la culpa por meterme en eso, yo porque escogí a la pareja. La vergüenza, creo yo, es más un aspecto moral.
¿Los casos de violencia contra los hombres son pocos, y por qué no son visibles en la sociedad?
Están bien ocultos. Se pueden observar cuando las evidencias ya son radicales; es decir, se puede conocer un caso de violencia contra el hombre cuando existan moretones, heridas o intentos de asesinato; solo ahí es cuando solicitan y permiten la ayuda. Por lo general, las víctimas dicen, yo voy a solucionar ese problema; ya me pasó, le entiendo y le perdono, o mejor no me meto en líos, sobre todo los jurídicos que son tediosos y que frustran. Es decir, la víctima está lastimado en su cuerpo y pensamiento y, a más de aquello, debe hacer los trámites y más; y, obviamente, eso le satura y le bloquea.
La vergüenza y el machismo, quizá, ¿influye a la hora de denunciar los casos de violencia en contra de los hombres?
Como le mencioné la vergüenza es más un aspecto moral y el machismo una cuestión ideológica. Para mí tiene que ver con el sistema de creencias que tiene la persona; se dan ánimo a ellos mismo diciendo, yo puedo superarme, no me voy a dejar, lo cual se identifica como un pensamiento de sobrevivencia que está presente en los seres humanos. En este sentido, intenta resolver el problema por sí mismo, se ayuda en el autoreconocimiento, pero debe saber que la violencia no se puede solucionar solo, siempre se necesita apoyo, primero del contexto cercano y después del social, como por ejemplo de las instituciones de ayuda. Dependerá del contexto que viva; por ejemplo, dirán: “¿qué le voy a decir a mi familia” o “no le voy a decir a nadie porque después a mí mismo me han de hablar”.
¿Cómo evitar la violencia, en todos sus ámbitos?
Hay que reconocernos como seres humanos; primero yo. En el caso que se tenga algún trauma que no permita a una persona que se exprese, debe trabajar en aquello, esto entendiendo que la violencia se da producto de que no puede expresarse y se bloquea; y actúa de una forma violenta para obtener el respeto, su rol y su función. Hay que trabajar en el autoreconocimiento personal, la inteligencia emocional; y se debe curar las heridas infantiles. No es difícil…
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