La muerte de la subteniente del Ejército Aidita Pamela Ati, en la Brigada «Napo 19», cuestiona formación de los efectivos militares
Muerte de subteniente cuestiona formación de militares, a más de que pone en debate aspectos como el espíritu de cuerpo y el saber acatar órdenes.
Nadie imaginó que la joven subteniente del Ejército Aidita Pamela Ati Gavilanes, de 23 años, en la Brigada de Selva Napo 19, el fin de semana, iba a perder la vida.
Y ello abrió un debate en torno al proceso de formación que estarían recibiendo los elementos uniformados.
Por ello, consultamos al Sgop. Técnico de Aviación en SP Jorge Aucanshala, presidente del Centro Paquisha, entidad especializada en la preparación de futuros uniformados.
Pero, es de anotar antes que acudimos, vía presencial y telefónica, a 3 centros que ofertan este mismo servicio, pero no quisieron acceder a un diálogo con su Diario La Prensa.
“Somos una empresa legalmente constituida, dedicada a la preparación, acondicionamiento físico y formación de jóvenes aspirantes a Fuerzas Armadas y Policía Nacional”, dijo.
Muerte de subteniente cuestiona formación de militares
El Sgop. Técnico de Aviación en SP Jorge Aucanshala, militar en servicio pasivo, dijo que ponen énfasis en el aspecto psicológico, trabajando con psicólogos clínicos especializados y en permanente formación en:
- Test de aptitud
- Racionamiento numérico, verbal, lingüístico y abstracto
- Test de personalidad
Los jóvenes son evaluados en este sentido, y de acuerdo a los resultados son sometidos a pruebas psicotécnicas o la entrevista psicológica clínica que les hacemos. Ahí el personal de Psicología identifica si algún aspirante tiene algún problema, para proceder a trabajar con psicoterapeutas que van a corregir la conducta o ver la personalidad
Esto porque hay aspectos que influyen en los jóvenes, a saber:
- Situación económica
- Si sufrieron maltrato familiar
- Si fueron víctimas de abuso sexual
Aquí, en la preparación, identificamos ello, porque sí influye para que los muchachos puedan postular; también entra el polígrafo, son las pruebas de confianza, el medidor de voz, que utilizan diferentes instituciones, y hay que trabajar a puertas cerradas para que los profesionales analicen y vean si están a tiempo de corregir esas anomalías
Formación de uniformados con visión futura
Desde cuando el joven se inscribe la disciplina empieza a funcionar:
- Formarse a una hora adecuada
- Venir correctamente uniformados
- Entrar correctamente a las aulas
- Saludar
- Cumplir parámetros
- Hacer el aseo de las mismas
Esto porque, con ello, van a vivir si pasan la prueba focalizada unos 25 años, o el tiempo que decidan quedarse en estas fuerzas, por ello se cultiva la disciplina, valores, tareas.
En una institución armada reina la disciplina, el respeto, la subordinación, y lo deben asimilar desde el primer día.
En FFAA la disciplina es a raja tabla y el muchacho tiene que tener carácter, y bien formado su temperamento y educación, sabiendo a dónde están postulando.
Disciplina no se negocia
Ellos tienen que vivir con 3 palabras en FFAA y Policía: ordene, a su orden y cumplida su orden, porque toda la vida van a tener superiores a quiénes respetar, leyes y normas que respetar, reglamentos que cumplir, entonces el joven sí se distingue de los jóvenes universitarios, pero sí hay bastante disciplina que les diferencia.
A los padres de familia siempre les recalcan que al final el objetivo es sacar buenas personas, con principios y valores.
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Espíritu de cuerpo
Hay que entender el concepto espíritu de cuerpo: es no dejar abandonado a un compañero, pero depende mucho la situación. En el caso militar es en ejercicios, conflictos, patrullajes.
FFAA tiene que hacer un poquito más de énfasis en la instrucción formal, hacer que el muchacho, cuando es alumno, sepa muy bien el concepto, ya que hay mucha gente que le entiende mal, y si el compañero hizo mal, dice tú eres mi body, te ayudo a cometer el delito, a veces no conoce que la ley castiga al autor, cómplice y encubridor, y hay muchos jóvenes que, de pronto, por no saber el concepto, son detenidos y van a la cárcel. Un espíritu de cuerpo dura hasta que hable 1, y de ahí irán en secuencia
¿Hasta cuándo uno puede acatar una orden?
Hay órdenes bien dadas que se las cumple, y órdenes mal dadas que no se las cumple. Las bien dadas están enmarcadas en el reglamento de cada fuerza, dice.
Ahora, desde que nos hicimos servidores públicos, ya tenemos la oportunidad de coger un abogado civil, ya no hay el abuso de facultades, a menos que un militar no sepa, pero no creo ha de pasar eso.
Antes sí había el abuso de facultades: haz esto, toma un dólar cómprame 1 whisky, cosas indebidas, concluyó.
Las órdenes mal dadas no se las debe cumplir, porque si lo hace ya está pasando a ser un encubridor o un cómplice, y si es asesinato o femicidio, la pena para el autor es el 100%, 50% para el encubridor y 25% para el cómplice. Se dañan la vida por no razonar
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