Sobre el caso de Mishell Anabel Sánchez Haro repasemos los 23 días de una trágica historia que unió a todo el pueblo de Penipe.
Durante 23 días, comuneros y familiares buscaron a Mishell Sánchez Haro por los páramos de Penipe. Su historia llegó a su fin con el desenlace que nadie espero.
Mishell desapareció el sábado 3 de agosto, a las 11:00 h, cuando se dirigió con su papá a la parroquia Puela, a cuidar sus vaquitas, y le solicitó permiso para practicar en la montaña.
Su papá vio hasta lo último que se dirigió a la montaña y él se regresó, toda vez que es el encargado de limpiar el canal de riego, y esto o hizo hasta las 20:00 horas.
Llegó a la casa, y no estaba ni su esposa ni su hija.
Como la primera trabaja en un complejo turístico hasta las 22:00 horas, junto a su casa, asumió que Mishell le ayudaba, pero cuando la mujer llegó se dieron cuenta del problema.
Mishel Sánchez: 23 días interminables
¿Dónde está Mishell? Empiezan a buscarla, el papá se desespera y sale para donde habitualmente entrenaba.
Llamó a un amigo, y entre los 2, a las 22:00 horas, salieron en su búsqueda.
¿Falsas alertas? Hubo 2 versiones:
- 1) En la parroquia El Altar se decía que la menor llegó a una tienda el sábado, a las 21:30 h
- 2) La vieron a las 16:00 h en Penipe, pero no hubo corroboración de aquello
Ambas resultaron erróneas.
¡Saltan las dudas! Avanza el tiempo y la ausencia de rastro causó mella en la familia, que esperaba lo peor, barajándose posibilidades:
- Si alguien quería un rescate ya era hora que se comunique
- Si se fue de la casa, algo se debía saber, aunque no había motivos para ello
- De pronto pensar en el novio, descartado, estuvo de viaje con sus padres, y apenas es un niño de 13 años de edad…
Y eso les lastimó el alma, pues, ¡estaban en la nada!
Padre de Mishell Sánchez también se perdió durante la búsqueda
¿Cómo pasaron los días? Su papá, Franklin Paúl Sánchez Mazón, la buscó toda la noche del sábado y la madrugada del domingo, al punto que casi se muere por ello.
¿Qué pasó? Unos sobrinos empezaron a llamarle y les respondió que solamente sabía que estaba en el volcán Tungurahua, pero no en un punto específico.
“Sigo caminando, sigo buscando el camino para ubicarme donde estoy”, decía.
Sus sobrinos recién lo ubicaron en la tarde, pero él tenía las manos hinchadas por el frío: le estaba cogiendo la hipotermia, y eso que fue con una cobija y chompa.
Desde ese día, padres, familiares y comuneros la salieron a buscar por todo lado.
Avanzó el tiempo, y pese a que la ley manda 5 días de búsqueda, la tarea se hizo por 7, aunque por disposición de la Fiscalía se retiraron hasta nueva orden.
Se sabía que seguían subiendo, pero sin coordinarlo con la familia ni con los parameros (comuneros).
El 19 de agosto se supo que se iba hacer un nuevo barrido por orden de Fiscalía, y que el equipo que iba a subir se integraría por unas 40 personas, más o menos:
- Armada
- Policía
- GIR
- Bomberos de Penipe, Riobamba y Ambato
- Voluntarios
El miércoles salieron a las 05:00 horas desde la comunidad Pachanillay, aunque sin resultados positivos.
Cuerpo de Mishell fue encontrado en quebrada
Después 23 días de angustiosa búsqueda, se conoció la noticia que nadie quería escuchar: se encontró el cuerpo inerte de Mishell Anabel Sánchez Haro, adolescente de 15 años de edad, en los páramos del cantón Penipe.
El trágico hallazgo se realizó la tarde del domingo 25 de agosto de 2024, en la zona de Tambo Capil, cerca de la cascada conocida como ‘Ojo del Fantasma’, en un lugar de muy difícil acceso.
Hernán Merino, Daniel Ortiz, Néstor Peñaherrera y Renato Lara, amigos del hogar de Mishell, fueron fundamentales en el hallazgo del cuerpo y el punto final al suplicio general.
Lo cierto es que para llegar al sitio donde se encontró la adolescente, fue necesario cruzar el río Puela, conocido por su peligroso caudal, y recorrer un terreno que había sido devastado por las lluvias en abril.
La extracción del cuerpo inerte tomó más de 4 horas, con la presencia de amigos, familiares y autoridades, a fin de cumplir las directrices que exige la ley.
Velorio de la deportistas de Penipe
Si bien la familia resolvió una duda, ahora las ideas giraban en torno al ¿qué pasó?, ante lo cual la autopsia asumió un rol crucial.
Así lo refirió Sonia, también vocal de la Junta Parroquial de El Altar.
Una vez realizada la actividad, el cuerpo fue trasladado hasta Pachanillay, el 26 de agosto de 2024, a fin de velarlo con los suyos.
Allí, más de 300 personas esperaban para darle un último adiós, así como para expresar solidaridad a la familia Sánchez Haro.
En la Casa Comunal se la veló hasta el 27 de agosto, donde a las 14:00 h se la trasladó a la cancha del lugar para que más gente pueda despedirse.
De ahí se la trasladó a la Escuela ‘Princesa Toa’, donde estudió, a fin de realizarle un sentido homenaje, pues era uno de sus orgullos.
Posteriormente, se la trasladó al Cementerio de El Altar, donde ahora su familia sabe que la podrá encontrar siempre…