Más allá de una tumba, un misterio: Se realizó un recorrido con Galo Falconí, trabajador particular del cementerio de Riobamba por 24 años aproximadamente, quien nos contó diversas historias de distintos personajes que se encuentran enterrados en este lugar. El Alboroto te trae Lo que Oculta el Cementerio de Riobamba.
Al iniciar el recorrido nos encontramos con la tumba del Dr. Alfonso Villagómez que murió con la peste bubónica en un hospital conjuntamente con todas las monjitas y pacientes. Por la cantidad de muertos con esta enfermedad se construyó una fosa común para enterrar a todos, sin embargo la tumba del Dr. Villagómez está separado de aquel lugar.
A su vez nos relató que las tumbas ubicadas a lo largo del cerramiento del cementerio y los mausoleos pertenecen en gran mayoría a personas natales y familias tradicionales de Riobamba, donde prácticamente está la historia de la ciudad.
También en este lugar se encuentran enterrados combatientes de guerra por ejemplo Pablo Segundo Marcelo Marino Suárez Montenegro, quien murió en la guerra del Cenepa en 1995 defiendo el país. Así mismo hay diversos personajes reconocidos enterrados como Mario J. fue uno de los geodésicos Franceses que llegaron a las mediciones de la línea equinoccial, murió en 1904, también se encuentra Luz Eliza Borja Martinez poetisa Riobambeña, entre otros.
Dimos un recorrido por La Avenida de los Alcaldes, así se llama a un sector de la parte principal del cementerio, porque se encuentran personajes representativos de la ciudad, por ejemplo, María Murgueytio Velasco de Guerrero primera alcaldesa de Riobamba, así mismo Edelberto Bonilla Oleas, también se encuentra el primer alcalde de la ciudad Gonzalo Dávalos Valdivieso, Fernando Guerrero Guerrero y Abraham Romero Cabrera.
Galo Falconí nos contó algunas historias de las tumbas del cementerio de Riobamba entre ellas el famoso sarcófago de la monjita. Se dice que todos los días a las doce de la noche en el lado izquierdo del cementerio aparece una monjita junto a una tumba blanca con una cruz negra, este sarcófago no tiene ninguna escritura ni dedicatoria.
La historia cuenta que este fue comprado por un padre resentido con su hija porque se hizo monja de claustro, el padre compró este solar para que cuando su hija muera tenga donde descansar su cuerpo; sin embargo pasaron los años la monjita murió y fue enterrada en el convento donde estuvo toda su vida y que fue el lugar del hecho de su muerte. Se dice que la monjita en honor a su padre visita todos los días aquella tumba que está vacía.
Otra historia dentro del cementerio es la de la tumba de los Alemanes o también conocida como la tumba de los extranjeros enamorados, este solar es propiedad de una pareja de alemanes su historia de amor termina cuando muere la esposa e inicia de nuevo cuando él decide traer dos sillas a la tumba, una para sentarse cuando vaya a leer y otra para que su mujer se siente a su lado.
Se dice que el alemán fue a leer en la tumba de su esposa todos los días hasta que falleció y desde entonces en las noches las dos almas enamoradas se encuentran y pasean juntos por los corredores del cementerio de Riobamba. Sin embargo pasado los años se robaron una silla, la más antigua y las placas, únicamente al final de la tumba se encuentra una silla que fue construida en 1917 aproximadamente.
En este cementerio también se encuentra el señor José Riquelme que falleció el 18 de febrero de 1935 se dice que vino desde Italia y en Riobamba fue acogido por la familia Brito, actualmente dueños de la Vienesa, ellos le dieron albergue y por la gentileza de la familia, Riquelme les enseño hacer las famosas palanquetas. Sin embargo no tenemos evidencias que esto sea cierto.
También en el cementerio existe una parte que hace algunos años se llamaba el cementerio de los pobres en este sector no existe ninguna organización ni nombres ya que enterraban a la gente una encima de otra y cuando un familiar encontraba un cuerpo ponían una cruz y por eso ahora se puede ver una cruz sobre otra cruz.
Para Galo Falconí es muy bonito trabajar en este cementerio, ya que es un lugar de paz y de tranquilidad. Galo nos dice que “ Poca gente visita el cementerio en la noche porque existe tanto comentario e historietas que se escucha desde pequeño; hay una cantidad de leyendas que en definitiva cuando crecemos deberíamos superar no tener miedo al muerto porque el muerto murió”.
Algo en que deberiamos pensar las y los Riobambeños es que a lo largo de los años se ha perdido mucha historia ya que no se han respetado las tumbas antiguas, se han estado enterrando sarcófagos nuevos encima de los antiguos y han puesto nuevas placas. También el señor Falconí menciona que hasta ahora personas llegan a robarse los cuerpos y es por esta razón que algunas tumbas se encuentran vacías.