No solo fue un robo, fueron cuatro actos delictivos que sufrió la Unidad Educativa ‘Amelia Gallegos Díaz’ viéndose afectadas sus sedes, el primer suceso ocurrió hace aproximadamente tres meses en la sede de bachillerato, en donde se conoce que, a pesar de que no se sustrajo nada, dejaron toda la infraestructura llena de grafitis, sin embargo, se evidenció que intentaron forzar algunas puertas del establecimiento, “el costo de reparación fue tremendo y se logró en base a la autogestión de los maestros, padres y madres de familia”, pero este acto vandálico también dio una pista, ya que se pudo reconocer algunas firmas de las paredes y presuntamente se trataría de un exalumno que no logró terminar el colegio, señaló Patricio Álvaro, rector del establecimiento educativo. ¡Los planteles educativos requieren más seguridad!
Antecedentes. “El segundo suceso ocurrió el 3 de abril en la sede de bachillerato, en la oficina del rectorado, donde se llevaron la computadora, dos proyectores y algunos otros objetos de poco valor, asimismo, habían huellas de zapatos en la puerta de la oficina de secretaría”, unos días más tarde, el lunes 17 de abril, se informó que en la sede de la ex escuela ‘Magdalena Dávalos’ encontraron la puerta de un salón partida en dos, además se llevaron equipos de audio y video de la maestra del curso.
Situación. Asimismo, el rector explicó que “el lunes 24 de abril, en la sede de inicial, los sujetos rompieron tres puertas y se llevaron bienes materiales de las profesoras, al igual que de la institución; micrófonos, parlantes y una laptop que era utilizada para las clases diarias, se llevaron las herramientas de trabajo” enfatizó.
A saber. “Los afectados de la unidad educativa son de inicial y primero de básica, lo que recalca la mala intención de los antisociales porque terminan haciendo un daño a los menores de edad en su proceso de enseñanza-aprendizaje” subrayó Hugo Chávez, director distrital de Educación, también solicitó a la ciudadanía que en el caso de ser testigos puedan informar para que inmediatamente estos robos no constituyan un perjuicio para la educación de los niños, niñas y adolescentes.