Líneas suspendidas: El transporte urbano inició actividades con el 50% de su aforo desde el 1 de julio, con el cambio de semáforo en el cantón Riobamba, sin embargo, a la fecha sigue presentando grandes pérdidas, considerando las inversiones que realizan a diario en gel, alcohol y desinfección general.
Para saber. Con las disposiciones de los COE’s Nacional y Cantonal, no todas las unidades pueden circular el mismo día, es así que, seis líneas han sido suspendidas por la falta de demanda de ocupación de usuarios.
Edison Romero, gerente de la Cooperativa de Transportes “Puruhá”, informó cuales son las líneas que actualmente se encuentran laborando: línea norte, Veinticuatro de Mayo, Santana en el sur, Licán línea 4, Sur Corona Real línea 5, Sixto Durán línea 13, Libertad línea 14, Inmaculada línea 7, Yaruquíes línea 8, San Gerardo línea 12 y la línea quince.
Dato. Las frecuencias que se encuentran suspendidas son la línea 11, 16, 9, 10 y 3. Según Romero, han sido suspendidas, pues no existe la suficiente demanda de usuarios. “Esto es temporal, cuando nos den la autorización para trabajar, es decir, cuando haya la demanda de usuarios, nos reanudaremos. Hoy estamos trabajando a pérdidas, porque no tenemos ingresos ni para el mantenimiento del vehículo, ni en las líneas que son principales y fuertes tenemos ingresos, peor todavía en las que son secundarias”.
Situación. En la población aún invade el miedo a ocupar este servicio, así lo dice Romero, pues, la situación es cada vez más crítica. “A pesar de las facilidades a nivel local y nacional sobre la autorización del aforo al 75 por ciento, es decir, que en los vehículos homologadas de tres puertas, podemos llevar de 60 a 66 pasajeros, el inconveniente es que la ciudadanía no hace uso del bus, en la mañana hasta el mediodía hay movimiento, en la tarde ya se vuelve apagado”, señaló.
Información. Las líneas recorren hasta las 19:00 h, pero en horas de la tarde es donde más se siente las pérdidas, pues, las unidades recorren con 8 o 10 usuarios, y así lo manifestó Luis Guamán, conductor de una de las unidades de transporte urbano, quien, además, comentó que, como chofer, éste era su sustento diario, para él y su familia, pero lamentablemente tuvo que buscar otras alternativas. “Hace pocos días volví a trabajar y se gana de acuerdo a lo que se gana”.
Servicio. Mónica Aucancela, ciudadana de la “Sultana”, dijo que ha ocupado por varias ocasiones este servicio, pero con cierto miedo, porque hay gente que no respeta el distanciamiento, sin embargo, “prefiero no salir mucho de casa, cuando es necesario lo hago por mi familia, sobre todo”, añadió.
Asimismo, las cuentas en las entidades financieras terminarían con el plazo de las cuotas aplazadas y eso preocuparía a este sector, pues, al mes, se genera en la actualidad alrededor de USD 180 lo que no significa ni un 20% para las ganancias que tenían hasta antes de la pandemia.
El representante de esta cooperativa dio a conocer que la situación es caótica. “Desde septiembre tenemos que ya pagar las cuotas, la mayoría de transportistas deben en el banco, han realizado convenios, pero, difícilmente, se podrá pagar”, expresó.