La inconformidad constante que existe por la liberación pronta de presuntos delincuentes atrapados en flagrancia. Enrique Donoso, presidente de la Corte Provincial de Justicia de Chimborazo, explicó la razón de esta situación.
La administración de justicia se sostiene en diferentes bases, la primera que son los jueces, la segunda está conformada por los fiscales, la tercera que son los defensores públicos y privados, además de la Policía, si una de estos participantes fallan el sistema no funciona.
En una analogía, los cuatros actores serían las ‘patitas de la mesa’, si una de ellas falta o no está bien, la mesa pierde la estabilidad que necesita para funcionar correctamente.
Si desde la Policía hacen procedimiento mal tomado, lo lleva a la Fiscalía y no se dan cuenta, el defensor lo lleva ante el juez, “por más que sea el asesino más grande, sino presentan los elementos necesarios al juzgador para dictar una prisión preventiva tiene que salir”, manifestó Donoso.
Aquí el presidente de la Corte indicó que las responsabilidades y las críticas recaen sobre los jueces cuando no se han analizado las fases anteriores para que llegue a manos de un juez. Al seguir con el proceso penal y sigue con el juicio, nuevamente sino trae las pruebas suficientes para condenar a un presunto asesino, sino existen las pruebas, habría una absolución