Las cifras en Chimborazo respecto al analfabetismo son preocupantes. Anteriormente se mencionó que esta provincia contaba con uno de los índices más altos en referencia a la desnutrición infantil, es por ello que Guillermo Lasso, presidente del Ecuador, trabajaría, como parte de sus “proyectos fundamentales”, en la erradicación de este mal. Por otro lado, también cuenta con un índice que debería concernir a autoridades y a ciudadanos: el analfabetismo. Pero, ¿se garantiza el derecho a la educación por parte del Estado si es que existen cifras de esta envergadura? El INEC indica que en Chimborazo hay una tasa del 11.9% de analfabetismo, concentrada en el sector indígena. Al respecto, Carmen Tiupul, exvicepresidenta del Movimiento Indígena de la provincia, menciona que otro mal que aqueja a las comunidades es la migración y, probablemente, la ausencia de los jóvenes han arrojado estos índices, y esto porque algunos adultos mayores de las comunas no saben leer ni escribir, tan solamente firmar. Las necesidades de los pueblos indígenas.
¿Qué tan importante es para el Estado tener una población alfabetizada?
En efecto, siempre hay que decirlo, la educación es la mejor herramienta para liberar a los pueblos, y justamente monseñor Leonidas Proaño luchó sobre eso, con los proyectos de alfabetización y luego generando Escuelas Radiofónicas Populares del Ecuador. La educación desde todos los espacios, y desde todos los tiempos, va a ser bien importante ya que, para la sociedad y el Estado, si tenemos a un ciudadano con niveles de educación considerados será, también, un aporte para el desarrollo de determinado lugar. En efecto, la educación siempre va a ser un derecho que debe ser prioritario para el Estado. En pleno siglo XXI no se puede considerar todavía que existan índices de analfabetismo en ninguna cultura y desde ningún territorio.
Históricamente, ¿considera que los pueblos y nacionalidades han sido excluidos de los sectores sociales, incluyendo el tema de la educación?
Las poblaciones indígenas, a nivel del país, no únicamente estaban excluidas en el derecho a la educación, hay algunos derechos que no han sido ejercidos o a su vez otorgados en un 100%, o con toda su aplicabilidad en las comunidades indígenas. Por ejemplo, ya vemos el derecho a la educación. En estos tiempos de pandemia se visibilizó, claramente, la desigualdad social. Muchos niños no lograron estudiar como debería haber sido, e incluso no pudieron aprender, porque en muchos territorios no hay conectividad, no hay señal telefónica. Entonces, el tema de cómo la desigualdad de un sistema se ha ido enquistando de manera muy fuerte en las comunidades y ha sido muy visible en estos últimos años.
En el caso de los niños sin conectividad, ¿optaron por trabajar con sus queridos padres?
En las comunidades el trabajar con los padres es normal, es muy normal. Los niños ayudan a sus padres en su quehacer diario, no se lo considera como un trabajo; sin embargo, los niños que no lograron acceder a la educación, obviamente, tuvieron como una depresión, esto porque, a diferencia de sus amigos, sus compañeros que sí iban a clases, que sí asistían de manera virtual, el niño de la comuna no podía, por más que tenga la buena intención, era difícil estar al mismo tiempo y lugar, por esas necesidades que, justamente, son las que hemos ido mencionando.
¿Están bien equipados los infocentros para solucionar los problemas de conectividad?
Lastimosamente, a nivel nacional el programa de infocentros se cerró, ya no están funcionando los infocentros en las parroquias, y me parece que ya hace más de seis meses de aquello.
¿Cree que se pueda articular proyectos con las instituciones de educación superior para erradicar esta condición?
Por supuesto. La Universidad Nacional de Chimborazo tiene una Facultad de Educación, y lo que nosotros podemos hacer es crear el vínculo con los sectores rurales, y hacer un convenio con la Unach, para que también se alfabetice a las personas que aún no saben escribir o leer. Pienso que sería un gran reto para las universidades, y un aporte para la provincia. El tema de analfabetismo no debería ser un tema provincial, realmente. Yo creo realmente que el hecho de que se haya tocado, nuevamente, esta problemática, debería ayudar a ver cómo aportamos y cómo tejemos acciones con distintas entes, y puede ser desde la misma competencia que tiene el Ministerio de Educación, en alianza, quizás, con grupo de compañeros. Pero, particularmente, yo siempre parto de la idea de que la educación es un derecho, y al ser un derecho tiene que vincularse con la sociedad.