Que existan los debidos estándares de seguridad en los diversos establecimientos que congregan a gran cantidad de personas, llámense hospitales, planteles educativos, estadios, coliseos o museos no solo que es un derecho, sino una obligación por mandato legal. Infraestructuras deben preservar la integridad.
A saber. Por ello acudimos a la Dirección municipal de Gestión de Ordenamiento Territorial, donde su principal, Juan Diego Remache, absolvió varias inquietudes.
Fundamento. “En cumplimiento de la Resolución Nro. 001-CTUGS nos encontramos evaluando, justamente, estructuras que receptan una gran cantidad de ciudadanos, que son las de alta concurrencia”, respondió.
¿Hay prioridades? A los establecimientos se los ha dividido en fases, priorizando, a la fecha, lo que tiene que ver con el régimen de salud.
Hoja de ruta. “Nos encontramos en un 50% de cobertura”. De 18 establecimientos visitados 17 tienen el ‘ok’ por parte de la evaluación estructural realizada con técnicos del ente, existiendo solo una novedad; sin embargo, se puede pasar a la siguiente fase, “que es justamente la planificación con un proyecto de reforzamiento estructural”. Prefirió reservarse el nombre.
¿Otros? La resolución indica que se debe priorizar. Se inició por los establecimientos de salud, que son los esenciales; en lo posterior se abarcará los establecimientos educativos, que también son de suma importancia; y, luego, “vamos abarcar estadios, coliseos, museos, toda infraestructura de alta concurrencia que sea de propiedad municipal o del Gobierno Central”.
Sépalo. “Este trabajo es bastante fuerte, no se ha hecho anteriormente; insisto, esta norma está en vigencia desde 2020, y no se ha hecho absolutamente nada en años anteriores. Nosotros arrancamos en noviembre de este año y, satisfactoriamente, con buenos resultados, hemos cubierto casi el 50% de establecimientos de salud; en 2024 iremos a lo que es educación”, y de ahí lo que dicta la normativa.