Implicados en Caso Metástasis pasaron de defender al correísmo y los Bucaram a representar al ‘Patrón’ Norero. Según los chats obtenidos de su teléfono móvil, Leandro Norero tenía a su servicio un equipo judicial y contable de 50 miembros. La nómina costaba USD 50.000 mensuales.
Tras su detención, en mayo de 2022, el narcotraficante Leandro ‘El Patrón’ Norero inició una incesante tarea por buscar, a toda costa, su impunidad. Quería que él, su esposa y sus hermanos sean liberados de los casos por lavados de activos y tráfico de armas en los que fueron imputados.
Para esto, ‘El Patrón’ armó un equipo multidisciplinario de abogados, contadores y peritos. Al frente de toda la operación estaba Helive Angulo, alias ‘Estimado’, quien cumplía las veces de un administrador de los bienes y el dinero de Norero.
El tamaño del equipo fue revelado por Norero y Angulo durante una conversación que mantuvieron el 9 de agosto de 2022, a través de la aplicación de mensajería Threema.
Este y otros chats forman parte del expediente del caso Metástasis, que se basa en las conversaciones que el capo mantuvo desde la Cárcel de Cotopaxi, entre mayo y octubre de 2022, hasta que fue asesinado y que ha revelado un complejo entramando que involucra, según la Fiscalía, a políticos, jueces, policías y periodistas.
Ese día, ‘Estimado’ pidió a Norero USD 50.000 para pagar a los dos equipos. Una persona identificada cómo ‘Santiago’ estaba al frente de los contadores y Cristian Romero de los abogados. Angulo le explicó a Norero que cada profesional cobraba USD 1.200, es decir, con los USD 50.000 alcanzaba para cubrir los honorarios de 41 profesionales.
A ellos se sumaban los jefes: Angulo, Romero y Xavier Novillo, alias Novita, otro abogado, que coordinaba al equipo en Guayas. En el caso están procesados, además de los tres ‘jefes’, los abogados Armando Flor, Kevin Prendes, Sofía García y César Ácaro, quienes se encargaban de presentar escritos y litigar en audiencias de orden menor.
Los expertos en Corte Nacional
El trabajo del equipo legal y contable de Norero estaba dividido por provincias, pero también operaba a escala nacional. Angulo, Novillo y Romero estaban al frente de la coordinación nacional. Los tres -además- planeaban llegar a la Corte Nacional de Justicia para que Norero y sus hermanos sean liberados con un habeas corpus cuyo trámite, según los chats, era irregular. Romero intentaba hacerlo a través de Wilman Terán, identificado como ‘Diablo’, y quien tras la explosión del caso Metástasis renunció a la Presidencia del Consejo de la Judicatura. Romero se vendía -pese a su corta trayectoria- como un especialista en el más alto organismo de justicia ordinaria.
El ‘reparto’ provincial
De acuerdo con la información que está en manos de la Fiscalía, Cristian Romero también coordinaba lo que ocurría en Santo Domingo. Bajo su asesoría, el narcotraficante habría llegado a los jueces Emerson Curipallo y Ángel Lindado; así como al fiscal Víctor Alcívar, alias ‘Pillo buena gente’. A punta de sobornos, Romero habría conseguido que Curipallo liberara al exvicepresidente Jorge Glas y a los sicarios alias ‘Madrid’ y ‘Cuyuyuy’.
Mientras que ‘Pillo buena gente’ alertaba a la agrupación de nuevos operativos o allanamientos. Romero también tenía incidencia en Cotopaxi, donde estaban detenidos Norero y sus hermanos Israel Norero y Johanna Zambrano. Se encargó de llegar a los jueces Santiago Zumba y José Luis Segovia y pagarles para liberarlos. La oferta no se cumplió y los sobornos se devolvieron.
En Guayas, aunque Romero actuaba en las audiencias junto a su equipo, la coordinación estaba a cargo de Xavier Novillo (Novita). Este sujeto se reunía con jueces y fiscales como Ronald Guerrero, alias ‘Momia’, para ofrecerles sobornos y acordar estrategias.
Mientras que en Manabí, actuaba directamente Helive Angulo. En los chats, ‘Estimado’ se jactaba de que Carlos Zambrano, expresidente de la Corte de esa provincia, estaba bajo su control. Así como Banny Molina, juez que ordenó la liberación fallida de Glas y Daniel Salcedo.
Las conexiones de los abogados
Cuando fue detenido, a través de Angulo y Novillo, Norero amplió su equipo legal y contrató a Cristian Romero y a sus asociados. A pesar de tener 32 años de edad y ocho años de carrera profesional, este abogado tuvo un crecimiento rápido, participó en casos importantes y defendió a figuras públicas. Una de sus primeras apariciones fue a inicios de 2020.
Romero asumió la defensa del exvicepresidente Jorge Glas en el caso Sobornos 2012-2016. En ese proceso se investigó el financiamiento ilegal de Alianza PAIS. Glas y Rafael Correa fueron sentenciados a ocho años de cárcel. Pero, las relaciones con el correísmo no acaban ahí.
En abril de 2021, en sus redes sociales, Romero publicó fotografías de una reunión con Virgilio Hernández, actual parlamentario Andino por la Revolución Ciudadana, y Viviana Veloz, vicepresidenta de la Asamblea. Habló de «grandes retos» en conjunto.
Mientras defendía a Glas y se reunía con más figuras del correísmo, Romero no era exclusivo. También trabajaba en Guayaquil junto a la familia Bucaram. El abogado y su equipo defendieron al expresidente Abdalá Bucaram, a sus hijos -‘Dalo’, Jacobo y Michel- y a su nuera Gabriela Pazmiño de las acusaciones por la supuesta corrupción hospitalaria durante la pandemia.
En uno de los chats del caso Metástasis, el 21 de junio de 2022, Romero aseguró a Norero que «el juicio más grande del país fue en contra de la Familia Bucaram y gané los 12 casos, y más de 14 habeas corpus».
Sin embargo, una vez que Romero empezó a trabajar con Norero, ‘El Patrón’ le pidió al abogado varias veces que se alejara de los Bucaram y trabajara exclusivamente para él. Esas conexiones molestaban al narcotraficante. También le reclamó airadamente cuando lo vincularon con Glas.
En el habeas corpus con el que se ordenó una liberación fallida de Glas, participaron los abogados Jonathan Aguinda, Royman Litardo y Hugo Lara, este último también defendió a Daniel Salcedo, cercano a los Bucaram y a Norero. Norero le dijo a Romero que tenía que cuidar a quien utilizaba en sus casos, porque no quería que lo relacionaran con nadie.
Esos mismos abogados habían interpuesto habeas corpus a favor de Norero y sus hermanos. Romero pidió disculpas y ofreció que nunca volvería a pasar.