Historia de amor: A los 14 años de edad no se puede determinar si un amor es verdadero o una ilusión pasajera, pero sea al cual fuera el caso, un adolescente oriundo de la parroquia Químiag, ubicada a casi diez minutos de la ciudad de Riobamba, decidió irse por su cuenta hacia el más allá, y lo hizo como su novia: ahogado en un pozo reservorio de agua de riego.
Caso. Sin duda, la situación conmovió a propios y extraños, y trae a colación la novela de “Romeo y Julieta”, que relata una historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de la oposición de sus familias, rivales entre sí, deciden casarse de forma clandestina y vivir juntos; sin embargo, la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen a que la pareja elija el suicidio antes que vivir separados.
Pero, en este caso del menor de edad no se puede determinar la real circunstancia o móvil, lo único cierto es que el adolescente estuvo muy enamorado, ya que sería su primera ilusión con una vecina de la comunidad, de 13 años de edad.
Toda esta tragedia inició los primeros días del mes en curso, cuando dos niñas fallecieron ahogadas en un accidente mientras jugaban cerca de un tanque reservorio, presumiéndose que cayeron al tanque y se ahogaron.
Es de anotar que a unos 200 metros de una vivienda habría un pozo de agua de aproximadamente unos tres metros de profundidad, lo que imposibilitó que sus esfuerzos por salir se consumaran. Se conoció que tres niñas eran las que participaron del juego y una de ellas se salvó y fue la que luego alertó a los progenitores de las víctimas.
Los familiares y los padres de las menores no podían creer lo que había ocurrido, hicieron todos los esfuerzos y las trasladaron raudos al Centro de Salud más cercano, pero, lastimosamente, los galenos del lugar solamente pudieron confirmaron su deceso. Ante esta tragedia todo el sector se solidarizó con las familias afectadas, incluso los dirigentes de la parroquia realizaron la donación de los dos ataúdes para que los hoy angelitos reciban una cristiana sepultura.
Y cuando todos pensaron que el dolor terminaría ahí nadie se imaginó lo que estaba por ocurrir, pues, días después el cuerpo de un menor de catorce años de edad apareció flotando en el pozo en el que fallecieron las niñas en las mismas circunstancias.
El adolescente salió de su hogar indicando que iba a recoger frutillas, pero pasó el tiempo y no retornaba… había tomado la decisión de suicidarse, presuntamente, sin pensar en el dolor que dejaría entre su familia, que tenían la esperanza de verlo una persona realizada, pero se dejó llevar por el dolor que provocó la prematura partida de su prima ilusión y optó por buscarla en el más allá. Ojalá este tipo de historias de dolor y tragedia no se repitan más.