En medio de las risas, el castañeo de los dientes y susto por el inesperado baldazo con agua durante los corsos de Carnaval, las comparsas como los carros alegóricos resaltan de la tradicional alegría y algarabía del Carnaval. Estas piezas, que alcanzan lo artístico, se crean en la bella ‘Sultana de los Andes’. Esculturas que alegran las calles de ‘Rio’
A saber. Sea en la época que sea, las estructuras armables que elabora Rómulo Mancero en su negocio, ‘Decoraciones Mancero’. En su taller, ubicado en la García Moreno y Barón de Carondelet, tiene los materiales para crear la magia que se moviliza por las calles de la urbe, cantones e incluso en otras jurisdicciones.
Situación. Mancero, desde niño, sintió la emoción de crear primero cuando pasaba tiempo con su abuelita, que tenía una tapicería, lugar donde aprendió técnicas para comenzar. En un principio creaba monigotes y, con el tiempo, pensó en grande, y ahora tiene su negocio, que a su decir es reconocido en varios lugares.
Curioso. En su taller la mínima varrilla, tela o pintura le sirve para la construcción de los carros alegóricos, los mismos que, de ser requeridos, se deben pedir con un mes de anticipación. Esta tarea la hacen con un equipo que ya conoce los trucos para armarlo y desarmarlo con rapidez, y aún más cuando salen de la ciudad a participar en otros cantones.
Sépalo. “De otros cantones prefieren cosas de fuera, no aprecian lo suyo”, explicó Mancero, ya que en la semana participó en Guaranda, y para los días que siguen de Carnaval participará en Guamote y Guano.
Optimización. Los materiales que usa para los carros alegóricos, en su mayoría, se reutilizan. Es así que en esta semana ha elaborado alrededor de 10 carros. Con añoranza recordó los años en los que la Municipalidad entregaba los recursos para que se respalde el arte.