La crisis que afecta a la provincia de Chimborazo no solo se limita a la falta de seguridad, sino que también se ve exacerbada por la escasez de sangre para cubrir la creciente demanda en la ciudad de Riobamba.
Según el personal del Banco de Sangre de la Cruz Roja de Chimborazo, se requieren mensualmente al menos 1.200 unidades de sangre para satisfacer las necesidades de las diversas instituciones de salud, incluyendo hospitales públicos. Esta cifra refleja la urgencia de contar con un suministro adecuado para atender situaciones críticas como partos, tratamientos para personas con enfermedades terminales, pacientes desnutridos y víctimas de accidentes de tránsito que necesitan transfusiones sanguíneas de manera inmediata.
Ante esta situación, el personal de la Cruz Roja de Chimborazo está llevando a cabo una campaña activa para movilizar a la comunidad y garantizar la disponibilidad de unidades de sangre. Esta labor implica esfuerzos considerables para alcanzar la meta de reunir al menos 20 unidades de sangre en cada jornada. Como parte de esta iniciativa, se instala una carpa en el parque Antonio José de Sucre todos los martes, brindando a los ciudadanos la oportunidad de contribuir a esta causa vital.
Bladimir Arauz, promotor de la campaña de donación de sangre, destacó que las personas pueden donar desde los 17 años de edad con autorización de los padres, y voluntariamente desde los 18 hasta los 65 años. Hizo un llamado a la comunidad a sumarse a este gesto altruista y solidario, instándoles a acercarse a la Cruz Roja para realizar su contribución. Esta acción colectiva se presenta como una medida esencial para abordar la escasez de sangre y mitigar los desafíos relacionados con la salud en la provincia, demostrando la importancia de la participación ciudadana en momentos críticos.