Ligia Muquinche trabaja más de cuarenta años en la venta de uno de los platos tradicionales de la localidad: famoso el mote con cuero que se vende en la calle Cristóbal Colón.
Al ser una zona muy concurrida por la población riobambeña y turistas, es un punto gastronómico infaltable para degustar de este exquisito plato tradicional de la Serranía ecuatoriana. Ahora ya conocido como cuero de la calle Cristobal Colón“Es un puestito de comida muy popular a la que asisten varias personas”, dicen.
Es un negocio que se ha mantenido de generación a generación en la misma cuadra, con los mismos sabores y por el cual su fiel clientela le visita a diario, religiosamente.
La migración de algunos de sus familiares cercanos al exterior le ha motivado a permanecer firme en este suelo, que dice tiene mucho que ofrecer.
Así, aunque no existan muchas fuentes de trabajos y la situación económica sea complicada a nivel nacional, su amor por la familia y su tierra le ha mantenido con la visión de tener un trabajo digno y honrado, con el que ha podido obtener buenos resultados durante todo este tiempo, según señaló.
Horario
Desde las 11:30 horas hasta las 19:30 horas la comerciante inicia con el trajín diario.
Sus hábiles y ágiles manos cortan apresuradamente el cuero y los pone al fuego en el momento que llegan los comensales. Les oferta un ‘abre boca’, un trozo de cuero recién asado para llevar a la boca, un suculento y suave alimento que ‘enamora’.
Estos deliciosos platos cuestan desde los dos dólares en adelante, “eso ya depende de la elección de los golositos”.
Muquinche tiene siete hijos y todos estudiados a punto de sacrificio y levantarse todos los días con la meta de brindarles educación, comida y todo lo que está a su alcance. Su esposo le acompaña en el camino de la vida y con una de sus hijas se alterna para salir a trabajar todos los días en las calle antes citada.
Sin duda, es una madre aguerrida y con el coraje de salir todos los días a trabajar, una actividad que le ha hecho firme, un pilar esencial para ver a sus más queridos triunfar y volar por su cuenta. “Todas las madres que trabajamos en las vías públicas agradecemos por las bendiciones que llegan a nuestras vidas y que nos brindan una esperanza y fortaleza”.