Es un tema muy interesante, pero bastante delicado, debiéndose saber primero que la educación es la base fundamental para el progreso y la superación del ser humano en todos sus aspectos, la misma que parte desde la casa, teniendo como los padres a los primero maestros que enseñan los valores y principios. De ahí viene la escuela, el colegio y la universidad, en la que toman partido los maestros, los mismos que constantemente deben estarse capacitando y listos para enfrentar los retos del día a día, desarrollando una actividad que se hace mayormente efectiva con el contacto directo, indica Roberto Tapia Oleas, doctor en Psicología. . El problema social de la educación virtual.
Pero debimos alejarnos…
Lamentablemente, la maldita pandemia del Covid-19 vino a desarmar todo lo que considerábamos normal, conminándonos a distanciarnos, desarmando la relación directa entre las personas, incluyendo al aspecto educativo.
¿Lo virtual nos ayuda a evitar al Covid-19?
Con el aspecto virtual estamos protegiendo la integridad, la vida de los seres humanos. Es sabido que esta pandemia no hace discriminaciones de ninguna índole, afecta al rico y al pobre… afecta de manera destructiva a todos por igual, debiéndose mantener un distanciamiento como medida de prevención, y entonces nos tocó echar mano de la tecnología para seguir desarrollando actividades que no pueden detenerse, como el aspecto laboral y, fundamentalmente, el proceso educativo..
¿En lo virtual estudia el alumno o sus padres?
Específicamente la madre. Ahora mandan las tareas virtuales y terminan haciéndolas las madres, porque el padre con el pretexto de que está trabajando le “delega” esta responsabilidad, pero la madre, como piedra angular del hogar, con amor, paciencia y entrega, termina haciendo quedar bien a su hijo.
¿Es conveniente seguir con lo virtual o retornar a clases?
Los cuarenta años que me he desempeñado como docente universitario me hacen dar mayor valor y validez a la enseñanza presencial, toda vez que la educación implica interacción entre el maestro, estudiante y padres de familia (estos últimos en los niveles primario y secundario), puesto que nos desempeñamos en un plano de colectividad, de sociedad.
Es decir…
Analizadas las circunstancias expuestas, la educación virtual tuvo que ser impuesta, obligada por las circunstancias, las mismas que desnudaron múltiples falencias, como el desconocimiento, la falta de preparación, las carencias y la desigualdad imperante..
¿Cómo afecta la falta de contacto al proceso?
Por ejemplo, un niño desde la Educación Inicial va interactuando, conociendo el mundo que le rodea, desarrollando habilidades motrices que un profesional capacitado en la materia le puede enseñar; pero, en la actualidad, esa tarea está destinada a los padres o a los hermanos mayores, los mismos que pese a destinar sus mejores esfuerzos no poseen los conocimientos y estrategias de quien se formó para desarrollar esta tarea. Y así va avanzando y volviéndose más complejo el proceso mientras aumentan los años de la persona.
¿Y en la universidad?
Citando el caso de la formación docente, en la universidad tenemos que desarrollar diferentes prácticas, nos enseñan desde cómo debemos pararnos, cómo modular nuestra voz, cómo saber controlar una situación y saber dirigir, y aquí viene la Psicología diferencial y la individual, lo que nos permite valorar al ser humano, las actitudes, las aptitudes, los aspectos didáctico y pedagógico, el aspecto científico.
Otro ejemplo…
Un estudiante de Medicina no va aprender de manera óptima virtualmente, tiene que estar con el cadáver, estudiar su anatomía y fisiología, porque si bien la tecnología ha avanzado al punto que el material didáctico es muy valioso, hay situaciones que no pueden omitirse por su esencia ni aprenderse a través de una pantalla.
En otro plano, ¿los estudiantes dinamizan la economía?
La educación es parte activa de la dinámica social; es decir, es pilar en el desarrollo social y político, pero también en lo económico, pues, contribuye activamente por todo lo que genera en torno a sí, y más con dos centros de Educación Superior, como la Unach y la Espoch, así como las extensiones de otras universidades que funcionan en la urbe, los que acogen a miles de estudiantes de otras latitudes y que contribuyen de manera directa.
¿Cómo debe recibir la academia a sus estudiantes en pandemia?
Con la experiencia docente, de director de las Escuela de Psicología y de director del Departamento de Bienestar Universitario considero que se debe orientar, asesorar y brindar acompañamiento efectivo a los estudiantes, estar muy al pendiente de ellos y tener la plena capacidad de detectar y reaccionar a la mínima situación, toda vez que cada individuo es un mundo independiente, a más que se desenvuelve en diversas realidades, por lo que la pandemia debió afectarles de manera diferente.
El psicólogo educativo, el orientador vocacional y el docente deben jugar un papel fundamental para que en el estudiante no se torne negativa su experiencia educativa en época de pandemia.