El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social es una entidad que se encarga de seleccionar a las diversas autoridades de control, pero sus funciones se han politizado, según Gustavo García Guerrero, doctor en jurisprudencia. ¿El CPCCS debería desaparecer?
¿Desde su punto de vista como profesional del derecho, ¿cómo ha visto el desempeño del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS)?
Particularmente considero que la idea de que nazca este Consejo desde sus inicios y para lo fue creado era para despolitizar el nombramiento de las autoridades de control, pero en este país como todo se politiza, al estar politizado, ya no cumple la función para lo cual fue creado que era despolitizar los nombramientos de las autoridades de los organismos de control. Lo que se ha hecho es replicar los mismos vicios que en su momento tenía otra función del estado que ejercía esos controles. Por lo tanto, yo creo que ha dejado de cumplir las funciones que tenía que cumplir desde las perspectivas constitucionales. Desde una visión eminentemente técnica, no podemos dejar de que cumpla su función mientras esté vigente en la estructura del Estado que por mandato constitucional es un poder, razón por la que de alguna manera hay que mantener y respetar las resoluciones que se tomen, pero siempre y cuando estén dentro de la Constitución y de la ley.
¿Cuáles son las funciones del CPCCS?
En el concepto, es la participación ciudadana que tiene directa injerencia en el nombramiento de las autoridades de los organismos de control y ejercer una especie de fiscalización de esos organismos para precautelar la honestidad y el buen desempeño de las funciones del Estado, pero lamentablemente se ha politizado de alguna manera y yo no creo que ahora esté cumpliendo con estas funciones.
¿Cree usted que CPCCS debería desaparecer?
No creo que sea un concepto general, pero yo creo que debería existir un organismo que cumpla esas funciones, porque cuando el pueblo ecuatoriano votó por la Constitución creyó en que era necesario despolitizar el nombramiento de las autoridades de los organismos de control y por eso votamos. Pero cuando ya se politiza, el tema es que ya se distorsiona su actividad, y se convierte en lo que estábamos esperando que no suceda. Yo no creo que sea simplemente desaparecer cuando algo no funciona. Por ejemplo, si un niño se porta mal no sé lo manda de la casa, mucho menos matarlo, la solución es que se porte bien y que se enderece el camino. Aquí también es así, cuando son instituciones que tienen un porqué y creo que bien llevada puede ser bastante útil, lo que hay que hacer es que cumplan su función, buscar los mecanismos para que las personas que lleguen sean las más idóneas, que cumplan con su función para que no se politice, porque sino nos vamos acostumbrando a que existe una institución u organismo que no funcione y hacerlo desaparecer.
¿Cuál sería la manera idónea para intervenir y hacer que se cumplan las funciones para las que se creó el CPCCS?
Yo pienso que cuando se creó el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social todo fue claro, es un poder del Estado y el conglomerado social, nosotros, somos los que debemos exigir aquello mediante procesos democráticos, en el pueblo radica la soberanía, nosotros debemos pedir que las instituciones cumplan. Se lo puede hacer mediante alguna reforma, donde pidamos que este ente sea independiente y más objetivo. Una de las opciones es una consulta popular, ya que es un mecanismo democrático de participación, donde se determine en qué estamos fallando para corregir de manera inmediata.
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