Ecuador se corona campeón en el Mundial de Asadores 2024 en Uruguay, uno de los equipos que representó a Ecuador estuvo conformado por Andrés Villa, chef riobambeño.
El equipo de Ecuador, integrado por representantes de Riobamba, Guayaquil y Lago Agrio, se proclamó campeón del torneo Mundial de Asadores, celebrado este fin de semana en Montevideo, Uruguay.
El prestigioso certamen reunió a 45 equipos provenientes de 13 países, consolidando el éxito de la selección ecuatoriana en el ámbito gastronómico internacional.
La selección ecuatoriana estuvo conformada por tres equipos: Latitud Cero de Quito, Fuegos de Ecuador de Guayaquil, y Brasa y Selva de Lago Agrio.
Latitud Cero, representado por Leandro Buratovich, Andrés Villa y María Fernanda Ruiz, quienes impresionaron a los jueces con una variedad de platos que incluyeron pescado asado, panceta de cerdo, pollo al gancho, cordero, costillas de cerdo y un postre.
¿Quién es el riobambeño que quedó campeón en el mundial de asados 2024?
Andrés Villa, joven chef de 25 años originario de Riobamba, fue uno de los pilares que llevó a Ecuador a lo más alto del podio. Con experiencia en la cocina, Andrés actualmente es chef del restaurante familiar Sabor Campestre y de la Quinta San Mateo en Licán.
Su amor por los asados nació en su época universitaria, cuando fue influenciado por su amigo y mentor Leandro Buratovich, también parte del equipo Latitud Cero.
Su rol en el equipo fue clave, dedicándose a la preparación de guarniciones y acompañamientos, una parte fundamental del éxito de la selección.
La Asociación de Parrilleros del Ecuador organizó los tres equipos que representaron al país en el torneo, y entre ellos, Brasa y Selva ganó el premio al mejor pescado.
La suma de los puntos obtenidos por todos los equipos hizo que Ecuador se alzara como campeón mundial, superando a potencias tradicionales como Argentina, Uruguay y Brasil.
A sus 25 años, Andrés Villa se perfila como una promesa de la gastronomía ecuatoriana y su trayectoria refleja el prestigio de la cocina ecuatoriana a nivel mundial.
Este reconocimiento no solo es un logro para los chefs ecuatorianos, sino también un impulso para el turismo, posicionando al país y su gastronomía como referentes en la escena internacional.