El trabajo infantil priva a los niños de su potencial y su dignidad, y perjudica su desarrollo físico causando daños psicológicos en infantes. En esta ocasión profundizamos sobre las afectaciones a nivel psicológico que provoca este fenómeno, de la mano de la psicóloga clínica Ana Patricia Chiluiza. Antes de profundizar en este tema, dejó en claro que el trabajo infantil está asociado a temas de violencia estructural, niveles altos de vulnerabilidad, nivel socioeconómico, acceso a servicios y problemas personales y familiares; entre otros.
El trabajo infantil ¿afecta al niño y niña a nivel psicológico?
Es una actividad que les priva del ejercicio de sus derechos, de su potencial y su dignidad. Al perjudicar su desarrollo físico, también lo hace a nivel mental. El trabajar impide que los niños asistan a la escuela; y quienes trabajan y estudian sufren tensiones a nivel psicológico, esto debido a que tienen que decidir, planificar, autoexigirse, y cumplir responsabilidades. Se alejan del hogar, lo cual les induce a una maduración prematura y la exposición de la violencia. Podrían tener una deficiencia en el desarrollo de habilidades sociales, pues no están acompañados a un sistema protector como los que entrega la familia.
¿Qué efectos negativos produce el trabajo infantil a nivel psicológico?
No están en el entorno primario de supervisión y socialización que es la familia. Ante la ausencia de las figuras primarias de protección y afecto, como son los padres, no tienen los cuidados adecuados. Los entornos de trabajo infantil son hostiles y no permiten cubrir las necesidades básicas de la infancia, como el cultivo del vínculo de apego seguro, la respuesta a necesidades afectivas, de seguridad, de alimentación y sueño. Por lo mencionado, se crea una estructura psíquica de alerta, de desarrollo de conductas negativas como la rabia, el enojo, las autolesiones y la tristeza inmersa por los traumas.
El dejar la escuela para trabajar, ¿cómo afecta al niño y niña?
La escuela es su segundo entorno de socialización y está adecuado a su edad. En este lugar disfrutan de su infancia. Aquí pueden aprender, jugar y relacionarse con sus compañeros y profesores, de forma sana. Ir a la escuela les ayuda a formarse para su futuro y su presente y pueden abrir una puerta para escapar de su contexto socioeconómico, que generalmente es de pobreza, movilidad humana y vulnerabilidad.
El trabajo infantil ¿afecta el desarrollo cognitivo del niño y niña?
En base a la psicológica del desarrollo y la neurobiología, se puede asegurar que las experiencias tempranas tienen una influencia importante en el desarrollo de las habilidades cognitivas y sociales. En este contexto, cuando los niños y niñas están expuestos a situaciones estresantes y de riesgo que por lo general se dan en la calle, como el estar alertas y amenazados, les genera un modo de sobrevivencia; es decir, sus hormonas del estrés se inundan. Están en modo alarma todo el tiempo. Esto no permite el normal funcionamiento a nivel cognitivo y emocional. A nivel cognitivo, los niños que trabajan no tendrán los mismos niveles de atención, concentración, memoria y procesamiento de las emociones.
Los daños a nivel psicológicos, ¿cómo afectan al futuro del niño y niña?
Desde la niñez se forma una arquitectura neurobiológica que se irá constituyendo en el ciclo de vida. En este contexto, los infantes que trabajaron, sin generalizar, cuando son adultos tienen falta de capacidad de autorregulación emocional, lo cual conduce a problemas con la autodefinición, alteraciones de la imagen corporal, agresión contra sí mismo y contra los demás. Esta falta de capacidad de autorregulación emocional se da porque de niños no tuvieron entornos protectores a nivel familiar y comunitario; es decir que cuando eran infantes y experimentaron emociones, éstas no fueron reconocidas ni resignificadas. Entonces, son adultos a los que les cuesta reconocer sus emociones y de los demás y resignificarlas. Tienen la sensación diaria de estar atravesando una experiencia emocional abrumadora, como lucha, agresividad, complacencia, sobreadaptación, aislamiento y bloqueo. Obviamente, no se debe generalizar.
¿Se debe normalizar el trabajo infantil en la sociedad?
El trabajo infantil violenta los derechos de los niños y niñas. La exposición a la violencia va escalando; cuando vemos por primera vez a un niño siendo maltratado, la segunda vez no nos va causar el mismo impacto. Quizá buscaremos situaciones más violentas, porque se crea una barrera de tolerancia a la violencia. En este sentido, debemos trabajar en nuestra sensibilidad y prejuicios. Las condiciones materiales de unos y otros no nos definen, pero todos somos parte del mismo tejido social…