En Ecuador, la identificación de cuerpos calcinados involucra análisis odontológicos, de ADN y radiografías para garantizar una identificación exacta
La identificación de cuerpos calcinados en Ecuador es un proceso complejo y delicado que requiere el uso de diversas herramientas científicas.
En casos de incendios, accidentes de tráfico u homicidios, donde los cuerpos sufren daños extremos, los expertos forenses deben recurrir a tecnologías avanzadas para lograr una identificación precisa.
Este proceso se lleva a cabo mediante la colaboración de diversos organismos, como la Policía Nacional, el Servicio de Medicina Legal, y el Instituto Nacional de Criminalística y Ciencias Forenses (INCIF).
Restos óseos
Uno de los primeros pasos en la identificación de cuerpos calcinados es el análisis de los restos óseos.
Según Carlos Vera, experto en medicina forense, «aunque el fuego destruye los tejidos blandos, los huesos pueden sobrevivir y proporcionar pistas clave«.
Los huesos largos, especialmente el fémur y el húmero, son los más resistentes al fuego y suelen ser los primeros en ser analizados.
Radiografías y Tomografía
Las radiografías y la tomografía computarizada (TC) son esenciales para obtener imágenes detalladas de los huesos.
Estas tecnologías permiten detectar fracturas y lesiones anteriores que pueden coincidir con registros médicos, acelerando el proceso de identificación.
Huella dactilar
Cuando las manos no han sufrido un daño total, la toma de huellas dactilares también puede ser útil. Sin embargo, esto es menos común en cuerpos calcinados debido a que la mayoría de las huellas se destruyen por el calor extremo.
Odontología forense
En los cuerpos calcinados, los dientes son una de las partes más resistentes al calor.
El análisis odontológico forense se convierte en una herramienta vital para los expertos.
Pruebas de ADN
A pesar de los daños causados por el fuego, las pruebas de ADN son el estándar en la identificación de cuerpos calcinados.
Vera afirma que, aunque el calor destruye gran parte del material genético, aún es posible recuperar ADN de huesos y dientes.
En casos donde el ADN nuclear no es identificado, los forenses recurren al ADN mitocondrial. Este tipo de ADN, heredado exclusivamente de la madre, puede extraerse de restos óseos o dientes cuando el ADN nuclear está demasiado dañado por el calor.
Uno de los mayores desafíos en este tipo de casos es la destrucción casi total de los tejidos y la imposibilidad de realizar una identificación visual.
El proceso de identificación de cuerpos calcinados es vital para ofrecer respuestas a las familias y hacer justicia.
Con el uso de métodos como radiografías, odontología forense y análisis de ADN, los expertos pueden superar las dificultades y asegurar una identificación confiable en situaciones como son cuerpos calcinados.
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