Clases presenciales: Fue el jueves 20 de agosto cuando el Comité de Operaciones de Emergencia Nacional (COE-N) anunció que se aprobó un plan piloto para el retorno voluntario a clases en un solo colegio de Guayaquil, a partir del uno de septiembre próximo. Es la Unidad Educativa “Alemán Humboldt” el establecimiento particular escogido para la experimentación, que será voluntaria.
Realidad. Éste es uno de los planteles educativos más costosos de Guayaquil.
Es aquí donde la ministra de Gobierno, María Paula Romo y el de Salud, Juan Carlos Zevallos, quienes evidenciaron la implementación de señaléticas y de normas para que los estudiantes puedan regresar a clases.
Si bien se ha enfatizado que este “retorno” es voluntario debido al temor de los padres de que sus hijos se contagien de Covid-19, también existe otra realidad: los estudiantes no están aprendiendo adecuadamente en las “clases en línea”.
Juan García, padre de familia de un plantel particular, comentó que en el caso de su hijo, poco o nada ha aprendido, sobre todo por la falta de experiencia de los maestros y también de los padres. “Yo hasta pensé en retirarle a mi hijo este año, pero hasta eso iba a ser un trámite”, comentó el ciudadano, quien dijo que, en su caso, son pocos los estudiantes en el curso, cerca de 15, pero no sabe cómo se podrá cumplir el tema del distanciamiento.
Situación. Del otro lado está una realidad prácticamente invisibilizada. La del sector rural, en donde no hay planteles particulares, todos son fiscales y con serias deficiencias, ya sea de internet, infraestructura y demás. “Acá todo hicimos por WhatsApp. Yo quiero que mi hijo estudie, pero no aprendió casi nada el otro año. Ahora sí da miedo que vaya a la escuela. Son muchos niños. Tocará mandarle bien protegido”, dijo Ricardina Valdez, de la zona de San Juan (Riobamba).
Datos: Clases presenciales
Plan piloto. La asistencia será un día a la semana, con horarios diferentes para los recreos y con la convocatoria de menos de un tercio del total de alumnado.
Particulares. En los establecimientos educativos particulares son me- nos estudiantes que en los fiscales. Sin embargo, el tema del distanciamiento es una realidad que preocupa a los padres en todo ámbito.
Juan García (padre): “Puede que en el aula puedan cumplir con el distanciamiento. Unos estudiantes irán un día, otros otro, sin embargo, el rato del recreo, de salir a las casas y en el transporte ¿cómo se hará?”
Planteles. Carlos Moreno, padre de familia de Riobamba, comentó que si bien le parece adecuado el retorno responsable a clases, este tipo de planes debía realizarse en planteles más reales, como los fiscales.
Poco factible. “En colegios grandes como ‘Cisneros’, ‘Maldonado’, ‘Riobamba’ ¿cómo se haría si se determina el retorno a clases? Ahí en un curso son más de 40 estudiantes. No es factible, creo yo”, dijo Moreno.
Casos de éxito y fracasos del retorno
Mientras los padres de familia de Chimborazo analizan, a pesar de que no se ha determinado un retorno a clases, si sus niños volverán o no a las aulas, existe una realidad: en casa no están aprendiendo cómo deberían, pero en las aulas podrían contagiarse de Covid-19.
En el mundo ya se han registrado algunas experiencias. Una de las más ejemplarizadoras la de Uruguay: el retorno a las aulas se dio en todos los establecimientos educativos con estrictos protocolos de bioseguridad, pero esta Nación tiene apenas 965 casos de Covid-19 y solo 29 han fallecido. Del otro lado China. Se dio el retorno a clases porque parecía que la curva se estancó y no había más casos; sin embargo, un nuevo rebrote provocó otra vez el cierre.
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