El barrio Cisneros de Tapi está ubicado al norte de la Sultana de los Andes. “Es uno de los sectores que se encuentran en el olvido”, según sus habilitantes, quienes han manifestado inconsistencias y problemáticas que los aquejan día tras días. La gestión realizada por la directiva del barrio no ha sido suficiente para solventar cada una de las necesidades. Cisneros de Tapi pide mejoras.
Rosa Moreno ocupa el cargo de presidenta de “Cisneros de Tapi” alrededor de 2 años. Ella manifestó que la pandemia fue un factor negativo, porque le impidió gestionar ciertos aspectos de manera presencial ante las autoridades.
Esto produjo que la directiva se limite a realizar algún llamado a las autoridades pertinentes, sin embargo, hoy ese pedido es de todos los días. Rosa comentó que la principal negativa es la no culminación del agua pluvial y sanitaria. No cuentan con este servicio básico. En época de invierno, las lluvias ocasionan la ruptura de tuberías, provocando que los desechos lleguen hasta la calles del barrio.
María Caive, moradora del sector, explicó que no existe una solución para resolver la situación de las vías. “Las autoridades no prestan atención a las necesidades que como moradores y ciudadanos exigimos para tener una mejor calidad de vida. La condición de las calles es otra de las problemáticas que durante muchos años no se resuelve.
El paso de los vehículos por las vías ocasiona el levantamiento de polvo en grandes cantidades, mismo que ingresa a las viviendas de las personas”, comentó.
El sector, al ser una zona con la carencia de un UPC y patrullaje por parte de la Policía, se ha convertido en una zona peligrosa para las personas y moradores que transitan por el lugar.