Bolívar unión naciones: Hace 283 años nació en Caracas (Venezuela) uno de los hombres trascendentales para la historia de América Latina, como fue Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte y Blanco, y dos siglos después su nombre y sus ideales siguen vigentes. Bolívar fue genial, visionario e importante.
¿Cómo se debe recordar hoy por hoy al Libertador Simón Bolívar?
Se lo debe recordar y reconocer como un hombre importantísimo, un hombre genial, visionario como ningún otro de su época, pero, sobre todo, como un hombre que tuvo sus aciertos y falencias. Por supuesto, no como un semidiós o tampoco como un villano, como se lo quiere catalogar ahora, reescribiendo la historia.
¿Cuáles son las obras cumbres del libertador Bolívar por las que hoy es tan reconocido?
Fue el constructor de las cinco naciones luego de lograr la independencia a través de varias batallas, organizadas por él. Muchas de ellas fueron combatidas y ganadas por sus generales, como el mariscal Antonio José de Sucre en Ecuador, como José Antonio Páez en Venezuela y más. Pero, claro, ellos estuvieron bajo la dirección de Simón Bolívar y su concepción, que fue fundamentalmente sobre la unión latinoamericana. Y eso se puede evidenciar en dos cosas fundamentales: en las Cartas de Jamaica, donde habla sobre esta unión y del peligro que significaban los Estados Unidos para estos países nuevos que iban a emerger y en su idea de realizar el Congreso Anfictiónico de Panamá, donde iban a estar todas las naciones que habían sido de la “América Española”, para así hacer un frente contra el imperialismo norteamericano; pero este congreso lo hizo fracasar el presidente de los Estados Unidos, James Monroe. Sin embargo, Bolívar era un hombres visionario para su época, pues, tenía la idea de una América unida.
¿Por qué no se logró la tan ansiada unión?
Hay que recordar la situación política de ese entonces. El nacimiento de la independencia se da a través, fundamentalmente, de liberarse del imperialismo de España. Y eso lo hace una clase social fundamentalmente que eran los grandes terratenientes y los comerciantes, que comenzaban a emerger como parte de América. Cuando se logra la independencia, es decir, una vez quitado el régimen español, comienzan a nacer las contradicciones propias que estaban subyacentes en América, de las otras clases sociales y así comienzan los caudillos, cada uno pretendiendo el dominio territorial. Así comienza el capitalismo en América. Se debe entender, por tanto, que el análisis de Carlos Marx no es nada acertado, porque se olvidó de una cosa: América era una colonia y nunca desarrolló su teoría marxista de la “contradicción de las clases sociales” bajo un ámbito colonial. Nunca entendió lo que pasaba en América.
¿Qué es lo que pasó?
Una vez liberada América comenzaron a nacer las contradicciones y los grandes caudillos: Páez en Venezuela, Francisco José de Paula Santander en Colombia y, en Ecuador, Juan José Flores, que si bien estuvo hasta el último junto a Bolívar, también tomó su parte en el Departamento del Sur, para lo cual había que eliminar la figura de Sucre. Ahí existen varias teorías conspirativas. Igual sucedió en Perú y Bolivia. La América que soñó Simón Bolívar estalló en mil pedazos frente a los intereses particulares de cada una de las regiones que una vez se habían unido. La Gran Colombia fue un sueño, pero un sueño bastante artificial. Cuando Simón Bolívar perdió el poder y estuvo a punto de morir, estalló todo el proyecto en mil pedazos.
¿Cómo aplicar la visión de Simón Bolívar a nuestra actualidad?
El presente es casi igual que ayer: está la amenaza del imperialismo norteamericano. Eso es un hecho. La explotación, por más que nuestros amigos neoliberales intenten justificar que el comercio es todo, la amenaza del libre mercado está ahí, la necesidad de una unidad de América también está ahí. Más allá de todo lo que se pueda hablar, está la necesidad de que los países de América se unan. Debería ser una prioridad. Un ejemplo claro de esto es Europa, con la Unión Europea, que ahora son un poder, a pesar de que existen fuerzas internas, como Inglaterra, que se hizo a un lado. Pero la realidad del gran sueño de Simón Bolívar, como es la unión de todos los países de América, sigue vigente y es algo que permanecerá en el tiempo y en la historia mucho tiempo.