Escudo de Guaranda representa el alma de Bolívar
El escudo de Guaranda representa el alma de Bolívar, reflejando historia, cultura y orgullo de sus pueblos andinos.

El escudo de Guaranda representa el alma de Bolívar, un emblema que refleja la historia, la cultura y la identidad profunda de sus comunidades andinas.
En el corazón de los Andes ecuatorianos, donde la memoria de los pueblos vibra en cada rincón, el escudo de Guaranda se erige como un símbolo lleno de historia, identidad y orgullo.
Su diseño no es solo un elemento heráldico, sino una narración visual de los valores, conquistas y riqueza de esta tierra montañosa y fértil.
La estructura general del escudo presenta un rombo de lados cóncavos y convexos, enmarcado por una cinta blanca que reposa sobre los bordes de dos cuernos de la abundancia.
En los extremos de esta cinta están inscritas las fechas que conmemoran la independencia de Guaranda del yugo español, mientras que en el centro destaca la frase: “Guaranda la soberbia, la ninfa de los Andes”, homenaje lírico de la poetisa Elisa Mariño de Carvajal.
Símbolos de abundancia y unidad
El cuerpo central del escudo está dividido en tres cuarteles, enmarcados por los cuernos de la abundancia, de cuyas bocas rebosan los frutos de la tierra guarandeña: café, arroz, caña de azúcar, naranja y banano.
Esta iconografía conecta la serranía con el subtrópico, mostrando la diversidad y fertilidad del territorio.
En la parte superior del escudo, nueve estrellas de cinco puntas se alinean formando un arco.
La estrella central, de mayor tamaño, representa a la ciudad de Guaranda, y las ocho restantes a sus parroquias rurales: evidencia de la unidad cantonal y el reconocimiento de sus comunidades.
Naturaleza, historia y cultura en cada cuartel
El la parte superior muestra al volcán Chimborazo, eterno centinela coronado por su nieve perpetua, que simboliza la grandeza y la constancia de las gestas de los guarandeños.
A sus pies, el cielo celeste y un Sol radiante iluminan desde el oriente al poniente, reflejando la vida, el desarrollo y la presencia ancestral de los pueblos originarios: Guarangas, Salinas, Tomabelas y Simiátug
En primer plano emergen las siete colinas que rodean la ciudad: San Jacinto, Cruz Loma, Loma de Guaranda, El Calvario, San Bartolo, Tililac y Talalac, que cual Roma de los Andes, resguardan con honor el espíritu de su gente.
En su parte inferior izquierdo, con fondo rojo sangre, porta una rama de laurel, símbolo de victoria y memoria de los episodios gloriosos: el 10 de noviembre de 1820, las gestas de Tanizahua (1860) y 1895, y el 15 de mayo de 1884.
También se rinde homenaje a próceres como Pedro Tobar Erazo, Josefina Barba, Manuel de Echeandía, Joaquina Galarza, entre otros héroes militares del cantón.
Por su parte, el cuartel inferior derecho, sobre fondo azul puro, exhibe una pluma, emblema de la vocación intelectual de la ciudad.
Guaranda ha sido cuna de escritores y pensadores, entre ellos Ángel Polibio Chávez y Gabriel Ignacio Veintimilla, quienes dejaron huella en la literatura nacional.
Un escudo que trasciende el tiempo
El escudo de Guaranda no es solo un adorno institucional; es un símbolo vivo que une a su pueblo con el pasado, el presente y el futuro.
En cada línea, cada figura, cada color, se encierra la esencia de una tierra altiva, culta, fértil y guerrera.
Como lo proclamó Elisa Mariño: la ninfa de los Andes sigue viva en cada uno de sus hijos.