Asalto y robo a mano armada en Riobamba: Asustada y consternada, todavía con lágrimas en los ojos, pidió ayuda a uniformados de la Subzona Nº6 “Chimborazo” de la Policía, que se encontraban en el sector del centro comercial popular “La Condamine”, una joven pareja que había dio víctima de un violento asalto y robo a mano armada.
Suceso.
El hecho delictivo se dio en la intersección de las calles Villarroel y Larrea, de la ciudad de Riobamba, y los afectados avanzaron hasta el sector de La Condamine para alertar a los policiales motorizados. La joven pareja había salido de su domicilio a realizar varias gestiones, entre ellas a cumplir con el pago de unas letras de una televisión, avanzó unos cuantos metros de la casa, cuando tres sujetos no identificados, entre ellos una mujer, los interceptaron, se acercaron, los amenazaron con un arma blanca y un arma paralizadora, le dijeron que no griten porque, caso contrario, les “iría mal”.
Mientras dos de los tres sujetos los amedrentaban, la chica les pidió que le entregue los teléfonos y todo lo que tengan de valor, mientras metía las manos en los bolsillos y se percataba que tenían 1.000 dólares en dinero en efectivo, con lo que pretendían cancelar una deuda pendiente.
Alerta.
Los uniformados policiales receptaron la alerta e inmediatamente comunicaron a los integrantes del Circuito “La Condamine” para emprender la búsqueda de los antisociales que intervinieron en este violento robo, dando a conocer las características y cómo habían estado vestidos.
Uno de los perjudicados informó que los teléfonos eran de alta gama y estaban valorados en 800 y 700 dólares cada uno, más los 1.000 dólares que se llevaron, el perjuicio ascendería a los dos mil dólares.
Peligro.
Los malhechores habían estado “respaldados” con un arma blanca (daga) y un arma que despliega electricidad (paralizadora) y, ante esto prefirieron quedarse quietos y evitar que les puedan hacer daño. Un familiar de la pareja mostró su malestar ante lo sucedido y demandó a las autoridades tomar medidas de seguridad inmediatamente, pues, “en todas partes de la ciudad se generan estos delitos”.