¿Se está normalizando la condición de violencia, inseguridad y criminalidad en la que nos hemos sumido en los últimos tiempos? ¿Es lo “normal”? Pues, el crimen y la inseguridad, se sabe, son consecuencias de una falta de atención en sectores prioritarios, como podrían ser la educación o el trabajo. Además, las mismas carencias laborales, en primera instancia, provocan que más personas se involucren a esta forma de relacionarse en la sociedad, que es la del crimen.
¿Y cuál es el impacto que sufre la ciudadanía, y la imagen internacional que se genera, con imágenes constantes de gente colgada de puentes, descuartizados, sicariatos, robos y asaltos? ¿Se ha vuelto un acto de supervivencia el andar por estas calles y hacer nuestra vida cotidiana? ¿Cómo se puede analizar esta nueva “normalidad”? Resultaría fuerte aceptar que, entre las producciones que se han realizado en este medio de comunicación, la población ha perdido la confianza en los agentes del orden, la Justicia y la institucionalidad.
Ahora, se menciona desde cada uno de los barrios o ciudadelas que los distintos sectores tienen que tomar acciones por su cuenta, generadas desde la propia organización, para combatir a la inseguridad… ¿esa la ciudad que merecemos?
Lo que se sabe en materia de homicidios…
En el Latin America Advisor se cuestionaron ¿qué es lo que está impulsando el aumento del crimen en Ecuador?, y entre el análisis que se realiza -en marzo de 2022- se menciona que el decano de la Escuela de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales aseguró que “la violencia criminal en Ecuador está creciendo de manera peligrosa, y parece no tener para”. A través de una comparación con las cifras de 2021, 2018 y 2022, los resultados no son alentadores, puesto que se sostiene que la tasa de homicidios en 2021 se ubicó sobre los 14 por cada cien mil habitantes; es decir, en 2018 había ocho puntos menos con respecto a esta estadística.
Pero, como un escenario que lacera la realidad nacional, en enero de 2022, “los homicidios se triplicaron si se compara con enero de 2021”. Pero esto podría no sorprender tanto a la ciudadanía que se informa constantemente. Lastimosamente, y porque esto forma parte de las coberturas periodísticas, la agenda informativa ya no puede hacer a un lado la criminalidad, la delincuencia y la violencia de nuestro diario vivir. Según las autoridades, se sostiene que el 80% de los crímenes que se dan a nivel nacional tiene que ver con “grupos criminales por el dominio territorial del narcotráfico”, ya sea ésta a una micro escala o a nivel macro.
Los robos, otro de los males que nos persiguen…
Andar por las calles, incluso céntricas de la urbe, genera incertidumbre. Cualquiera que sea el motivo para salir y rodar las calles daría la impresión de estar en riesgo de un asalto. Sectores como La Estación, el parque Maldonado -teniendo a la Policía Judicial cerca del sector-, el parque Sucre se ha vuelto incómodo para la ciudadanía. Y esta impresión se vería reflejada en los resultados de una encuesta que realizó la Consultoría Interdisciplinaria en Desarrollo Gallup sobre si los ciudadanos han sido víctimas de robo o asalto en los últimos meses. La encuesta fue realizada en países de América Latina y lastima, igual, saber que Ecuador se encuentra entre los primeros países latinoamericanos en tener más víctimas de robo o asalto.
Respuestas oficiales sobre la inseguridad
Con respecto a esta realidad que se vive a nivel nacional, el presidente Guillermo Lasso generó el I Encuentro por la Seguridad Nacional, y asegura que se dieron cita más de 300 autoridades de Ecuador, es decir que se reunió con alcaldes, prefectos y gobernadores para tomar acciones respecto a los datos mencionados anteriormente, aunque hay que reconocer que los casos delincuencias no solo se concentran en robos y homicidios.
Lasso llamó, un día antes de esta reunión, a “la unidad de todos los ecuatorianos”, a fin de estar “claros frente a la amenaza de los delincuentes, de los violentos” y de los narcotraficantes. Sería importante saber si existen resultados que aseguren el éxito de la reunión. Es importante también reconocer que se debe invertir en una cultura de prevención, sobre todo en aquella que envuelve al consumo de drogas, el alcoholismo y la salud mental, pues, estos también son factores importantes, puesto que la prevención de estos males y un cuidado psicológico adecuado evitarían que se den conductas delincuenciales.
¿Hay acciones locales?
¿Cuáles son las acciones individuales que se han tomado en cuenta para evitar a la inseguridad?, ¿qué se hace desde los barrios? Con la información global sería importante recabar datos locales para saber cómo se enfrenta la ciudadanía a este mal.