Abuso sexual en casa hogar/ Detalles sobre lo que sucedió hace pocos días en la Casa Hogar “San Carlos” del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) de Riobamba, donde presuntamente se dio un caso de abuso sexual de parte de un adolescente en contra de un niño de diez años, no se puede dar, porque las leyes vigentes en el Ecuador prohíben el que se dé a conocer sobre estos casos, para proteger a los menores de edad.
Situación.
Lo que sí, ha generado muchísima preocupación. John Muriel, director distrial “Riobamba-Chambo” del MIES, recordó que se trata de una presunción y que se aplicaron los protocolos indicados para estos casos.
“Estamos en una fase investigativa, pero el protocolo sí se activó. Se alertó a las instancias pertinentes, al órgano judicial, se tomaron los procedimientos que se tenían que hacer y el juez tomó las medidas cautelares pertinentes”, dijo el funcionario.
Muriel aseguró que tanto el presunto agresor como el agredido están recibiendo cuidados y apoyo psicológico que se requieren en este tipo de casos, pero no solo para ellos, sino para los otros 29 menores de la Casa Hogar “San Carlos”.
Caso. El funcionario enfatizó que en la casa hogar se cuenta con todo un equipo de profesionales, como tutores, psicólogos, facilitador familiar, trabajador social. “Tenemos un equipo completo”.
Preocupación. Luis Terán, activista por los derechos de la niñez y adolescencia, dijo que todos estos hechos son consecuencia de la crisis por la que atraviesa el país.
“Las violaciones, las violaciones a los derechos, los femicidios, infanticidios, abusos, suicidios van a aumentar porque en esta crisis los grupos prioritarios no tienen una verdadera atención prioritaria, y los recursos se están destinando a otras prioridades; por tanto, no hay servicios que garanticen derechos”, comentó.
Opinión.
Terán recordó que los programas de servicios, mucho más los destinados para niños, niñas y adolescentes, que tienen doble y hasta triple vulnerabilidad, que no tienen la posibilidad de una responsabilidad paterna, recae la responsabilidad, la de su vida y desarrollo lo asuma el Estado.
“En este caso las casa hogares que son casa sustitutas, por tanto, estos programas deben ser integrales, deben garantizar no solo los derechos de la supervivencia o los básicos, sino todos los derechos, pero sabemos que el Estado no tiene los programas de atención con suficiente cobertura y se tiene casas hogares como la de Riobamba que asume la cobertura no solo de la provincia, sino de fuera, porque la demanda supera el servicio. Se les debe garantizar además educación, salud, vivienda, vestido y una convivencia saludables”, enfatizó.
Terán: “Al parecer, el derecho de protección, por la condición en la que viven estos niños y adolescentes, no se está ejecutando de manera adecuada”.
Espacios. “Deben tener un servicio judicial, un abogado permanente, trabajadores y psicólogos. También madres cuidadoras que reemplace, de alguna manera, las acciones de una madre”, dijo Terán.
Sybel Martínez. “La Junta de Derechos debe dictar medidas de protección, pedir al MIES informe sobre la situación de todos los niños de la casa hogar y de los otros dos menores”, dijo Sybel Martínez, de la Junta de Quito.
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