A los 80 años sigue con su labor diaria

A los 80 años sigue con su labor diaria, Pedro Aniceto, recorre las calles de Riobamba con su pequeña mercadería. Este hombre camina lento y protegido con su mascarilla, y pese a que sabe que el tercer domingo de junio es el Día del Padre, como vive solo, prefirió salir a la calle, porque ya no lo había hecho hace cuatro días, para laborar.

 Ejemplo. El comerciante octogenario considera que tiene un trabajo honrado y justo, destinado para él.

Esta emprendedora actividad la heredó de su segunda esposa, que era de Imbabura, pero que ya falleció.

Sentimentalmente, a Pedro Aniceto la vida no le jugó una buena suerte, su primera esposa murió, su primera hija también falleció, se hizo de un segundo compromiso, pero el Todopoderoso se la llevó, y otra vez enviudó. 

Historia. Pedro Aniceto Naula Tenesaca tiene un hijo, pero no reside en la ciudad, por lo tanto, está sentenciado a vivir solo, pero dice que sus vecinos del barrio San José del Chibunga son buenos.

En el Día del Padre salió a recorrer las calles con cuchillos y tijeras en la mano, así como con cordones y fajas en sus hombros. No ha podido viajar a visitar a su familia en El Ángel, provincia del Carchi, donde vive su hijo.

Criterio. Es una persona muy segura de lo que hace, a tal punto que para dar su nombre ingresa su mano derecha en el bolsillo de la leva y saca la cédula, que precisa que Pedro Aniceto nació el primero de febrero de 1939 en la parroquia Matriz del cantón Guamote, y que migró a la ciudad de Riobamba y se vinculó a la actividad comercial.

Agrega que hace 60 años -o más- vive en San José del Chibunga, y recuerda que era un sitio abandonado. “Fui a este sitio porque mi esposa me llevó y desde ahí me quedé en este lugar, que en la actualidad se encuentra bien poblado”, dice.

Recuerda que la familia Lituma le llamó para que le venda mercadería de toda clase y desde ahí se dedicó a esta labor, que le mantiene activo. A veces sale con la mercadería, solo con el fin de abrigarse un poco y no sentirse solo en la casa, donde ha visto pasar los años, la vida… y salir a sus familiares…

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