Un compatriota cuenta cómo es la ruta del migrante desde Ecuador hasta EEUU por El Salvador. Por obra divina, llegaron todos sanos y salvos
Ruta difícil la del migrante desde Ecuador hasta EEUU por El Salvador.
Kevin Patricio es un quiteño de 38 años, casado y padre de 2 menores de edad.
La situación en el país no daba para más en su hogar, y más en la actividad que él se dedica, como es la construcción, a más que las carencias y deudas lo agobiaban.
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Pensaba y repensaba y no encontró salida a la situación, hasta que se encontró con unos amigos.
Todos tenían algo en común: ¡La vida era insostenible en el Ecuador!, y debían encontrarle una salida como y a costa de lo que sea.
Y una idea, descabellada al principio, tomó cuerpo con el paso de las horas: ¡Viajemos a Estados Unidos!, fue la decisión definitiva.
Así, 6 personas, entre hombres y mujeres, pagaron individualmente USD 8.000 dólares.
Por orden del ‘Coyotero’ sacaron el pasaporte, pues, debían llegar a El Salvador.
Y así lo hicieron, partieron desde el Aeropuerto de Tababela sin novedades.
Llegaron al Aeropuerto ‘Monseñor Oscar Romero’, de San Salvador, sin novedad, y pensaron todo sería así… Nada más lejos de la realidad…
Por “seguridad”, guardaron el dinero en los zapatos o lo daban a las mujeres, ya que, afirma, no las revisaban totalmente.
A veces la gente guatemalteca les extendía la mano, principalmente en las iglesias, cuyos sacerdotes les compartían la limosna.
Les mandó por unos maizales, caminaron hasta que los pies no resistieron y no encontraron a ningún policía, dándose cuenta que fueron engañados.
Así, “Sin querer queriendo”, como dice el ‘Chavo del 8’, conocieron El Salvador y Guatemala, partes a pie y otras en carro, esto cuando les daban un ‘aventón’.
La mayoría se armó de valor y decidió avanzar confiada en la voluntad divina.
Caminaron días enteros, bajo el Sol y el calor del día o el frío y temor de la noche; pero, en cada pueblo se separaban, para que la Policía se confunda y no siga al grupo.
En una ocasión, desorientados, contrataron a otro coyotero, el que les cobró 4.000 dólares solo para hacerles cruzar hasta la frontera con Estados Unidos.
Hasta que el ‘Coyotero‘ les dijo que se callen o si no les disparaban.
Kevin se arrepentía hasta el alma, solo quería regresar a su amado Ecuador, pero, se acordaba de la familia y el por qué salió, y se tragaba el temor.
Lo lograron, estaban a un paso de cumplir su cometido, y llegó la decisión más dura:
¡No lo podía creer! ¡Cumplieron parte del sueño!
En NY cada amigo tomó su rumbo, y ahora cada uno le pelea a la vida a su manera.
Una vez allí dice enfático que el ‘Sueño americano’ no es tan real porque, si bien gana más dinero, también debe gastar más, ya que todo es más caro.
¿Cuánto envía? A veces USD 700-800, y cuando está bajo unos 300, no se avanza más. Por ejemplo, ahorita es invierno, ya no hay nada, bajan los trabajos.
En ‘La Gran Manzana’ se desenvuelve en lo suyo, la construcción. Consiguió trabajo en las llamadas ‘Paradas’, que son los exteriores de las ferreterías grandes.
Kevin Patricio cuenta que una vez laboró con un ecuatoriano que nunca le apoyó, más bien lo explotó, por lo que tuvo que salirse e ir a ‘La parada’ nuevamente.
¿Cuánto gana por hora? A la fecha cobra USD 25 la hora, pero, con los taxes (impuestos) son USD 22.
¿Duerme en ‘camas calientes’?
El quiteño trabaja en la construcción, y enfatiza que el ecuatoriano allá es muy egoísta, no ayuda, más bien se abusa y perjudica al paisano.
¿Algo le recordó a Ecuador en el viaje? Dice que sí, que en el camino se encontró con miles de migrantes, lo que “parecía la romería a la Virgencita del Quinche”
¿Lo más bonito?
“Le conocí a la Virgen Guadalupana, me le arrodillé y le pedí que nos ayude a llegar y que mi familia siempre esté bien”
¿Lo volveríahacer? Se queda en silencio 1 minuto… Siento y escucho que llora…