Señales iniciales del cáncer bultos y cambios en la piel pueden alertar sobre la enfermedad detectarlos a tiempo es clave para prevenir.
El cáncer de mama, una de las principales causas de mortalidad en mujeres, demanda una atención oportuna para aumentar las posibilidades de supervivencia.
Especialistas como el cirujano oncólogo Víctor Orna, de Onco-Rio, destacan que esta enfermedad no discrimina edad ni condición social, aunque afecta principalmente a mujeres mayores de 50 años
Es importante conocer los síntomas iniciales de esta enfermedad.
Entre las principales señales de alerta se encuentran:
- Bultos o masas en los senos.
- Cambios en el tamaño o forma del pecho.
- Hundimientos en la piel o el pezón.
- Secreciones anormales, especialmente con sangre.
- Textura de piel similar a la piel de naranja.
El autoexamen de mama, realizado a partir de los 20 años, puede ser clave. Este debe complementarse con chequeos médicos regulares para garantizar un diagnóstico temprano.
Factores de riesgo y cambios hormonales
El cáncer de mama está relacionado con varios factores de riesgo, como:
- Antecedentes familiares de cáncer de mama.
- Inicio temprano de la menstruación (antes de los 12 años).
- Menopausia tardía (después de los 55 años).
- Uso prolongado de anticonceptivos hormonales o terapias de reemplazo hormonal.
Además, la exposición prolongada a hormonas como los estrógenos y la progesterona puede aumentar las probabilidades de desarrollar la enfermedad.
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Diferenciar afecciones benignas de malignas
El cáncer de mama puede confundirse con otras afecciones como quistes o fibroadenomas. Los tumores malignos suelen ser:
- Fijos y de bordes irregulares.
- Asociados a alteraciones en la piel.
En contraste, los quistes son móviles y frecuentemente dolorosos, mientras que los fibroadenomas son firmes y no suelen causar molestias graves.
Los estudios de imagen, como las mamografías y ecografías, son esenciales para confirmar o descartar un diagnóstico.
En Ecuador, una mamografía tiene un costo aproximado de 30 a 40 dólares y es recomendada a partir de los 40 años. Para mujeres más jóvenes, se sugiere una ecografía mamaria, que ayuda a detectar lesiones en tejidos densos.
En casos específicos, se pueden realizar biopsias o estudios genéticos avanzados, especialmente si hay antecedentes familiares. Estos permiten identificar mutaciones en genes como el BRCA1 y BRCA2, asociados a un mayor riesgo de cáncer.
Panorama nacional del cáncer de mama
El cáncer de mama afecta a 38.2 de cada 100,000 mujeres en Ecuador, según el Registro Nacional de Tumores. Cada año se diagnostican más de 30,000 nuevos casos, de los cuales el 22% corresponden a esta enfermedad.
Según proyecciones de Globocan, para el 2035 los casos podrían aumentar en un 46.3%, alcanzando 5,213 nuevos diagnósticos anuales.
El doctor Horna enfatiza la importancia de participar en campañas de detección temprana y realizar chequeos periódicos. La combinación de exámenes como la mamografía y la ecografía puede marcar la diferencia.
El cáncer de mama puede ser letal, pero la detección temprana salva vidas
Víctor Orna, cirujano oncólogo
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