John Vinueza, alcalde del Municipio de Riobamba, propuso una ordenanza para cambiar el propósito de EMAPAR. Galo Falconí lo tildó de ‘disparate’.
El 02 de octubre, en la sesión de Concejo Municipal de Riobamba, John Vinueza presentó una propuesta de modificación de la ordenanza que rige la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (EMAPAR).
La propuesta busca ampliar las competencias de la empresa para que pueda convertirse en una entidad multinegocios.
Esta transformación permitiría que la empresa participe en proyectos de construcción, consultorías, mantenimiento de infraestructuras y más, con el fin de generar nuevas fuentes de ingresos para la ciudad.
A pesar del entusiasmo del alcalde, algunos concejales expresaron sus preocupaciones sobre la viabilidad y el respaldo financiero de esta expansión.
Dado que, en un informe presentado durante la sesión, se mencionó que EMAPAR actualmente tiene una deuda con el Municipio Riobamba de USD 43 millones por el proyecto Maguazo-Alao y la perforación de varios pozos.
Además, actualmente hay una deuda de USD 14 millones en letras atrasadas que ya fueron pagadas al banco por el municipio. Pero la empresa de agua potable aún no ha podido cubrir.
Cambio de EMAPAR
John Vinueza, propuso que la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado pase de llamarse EMAPAR a Empresa Pública Riobamba.
El objetivo principal de esta modificación es que EMAPAR pueda desempeñarse en varias áreas. Tal como la construcción de viviendas de interés social, la fabricación de materiales de construcción, gestión de eventos culturales y de seguridad.
Además, Vinueza planea que la empresa gestione una zona franca en la ciudad, lo que contribuiría al desarrollo económico de la región.
Asimismo, el alcalde contempla la posibilidad de que EMAPAR participe en proyectos fuera del cantón. Permitiendo que sus servicios sean contratados por otros municipios a nivel nacional e incluso internacional.
Ante la exposición, el concejal Patricio Guaranga, sugirió que, una vez conocido el proyecto de ordenanza por los concejales, se remitiera a una comisión para su debate.
Esto con el objetivo de incorporar los aportes de los concejales y realizar talleres correspondientes antes del segundo debate.
Sin embargo, durante la votación, la moción fue rechazada con 6 votos en contra, 4 a favor y 1 en blanco, lo que llevó a que no fuera aprobada y no pasara a segundo debate.
Por otro lado, el concejal Galo Falconí, expuso su total rechazo a la reforma, en la que asegura que existe un informe financiero. El cual indica que EMAPAR generará pérdidas a mediano y largo plazo.
¿Por qué Galo Falconí se opone a la alianza público privada de EMAPAR?
Según Falconí, esta «superempresa» podría afectar gravemente la estabilidad laboral de los empleados municipales y el funcionamiento de la ciudad.
A su vez, explicó que la creación de esta entidad, que centralizaría una amplia gama de actividades bajo un solo organismo, amenaza con restar poder a los concejales y al propio municipio.
Además, cuestionó la falta de claridad en los informes presentados, que no provienen de la actual empresa pública EMAPAR, y destacó que esta empresa ya enfrenta dificultades financieras.
Falconí calificó la propuesta como «una barbaridad» y expresó su deseo de que los concejales reconsideren sus posturas en el próximo debate del proyecto.
Subrayó que, además de los impactos laborales, esta nueva entidad podría competir directamente con los ciudadanos al involucrarse en actividades como la distribución de combustibles.