Toda el agua que se consume en las casas, empresas o campamentos debe tener un tratamiento adecuado para devolver un agua tratada para tener menor contaminación que sean devueltas a sus afluentes, como los ríos, y ésta no es una obligación solo de los municipios, sino también de las empresas u hogares que prefieran reducir el impacto ambiental que causa sus actividades diarias con un adecuado tratamiento de aguas contaminadas
Sépalo. La función de las plantas de tratamiento es de limpiar el agua usada para eliminar residuos como plásticos, trapos, vísceras, materia orgánica y restaurar el oxígeno que sirve para fomentar la vida de los ríos que son los lugares en los que se vierte todo este líquido.
Rectoría. Desde el Ministerio de Ambiente Agua y Transición Ecológica (MAATE) realizan el control de las plantas, y cada tres años deben presentar un informe de auditoría ambiental, es decir, cómo está operando la planta, explicó Gavino Vargas, titular de está cartera de Estado. Esta agua, una vez que ha sido tratada volverá a su cauce y habrá otras personas que la usan; claro, no será apta para el consumo humano, pero servirá para el riego, por ejemplo.
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