La inseguridad en la ‘Sultana de los Andes’ va en aumento, al punto que no se salva nadie, pues, muchos tratan de robar y extorsionar a la ciudadanía, en especial en las redes sociales, donde la gente no demuestra lo que es. “La escopolamina te mata en vida”.
Contexto. Drogar a la gente es una de las técnicas que se ha vuelto más común entre los malhechores en los últimos tiempos, y las más comunes son la burundanga y la escopolamina, que nublan los sentidos haciéndo a las personas incapaces de pensar por ellas mismas, actuando como inhibidores, borrando recuerdos y reduciendo la voluntad del afectado.
Situación. Es así el caso de ‘Marco’, un hombre de cuarenta y cinco años de edad que, por cuestión de seguridad y para que no lo reconocieran no quiso identificarse, quien manifestó: “realmente parece que todo lo que viví fue una pesadilla, porque no me acuerdo de nada. Todo inició cuando estaba en una aplicación de citas y me contacté con una mujer de aproximadamente cuarenta años de edad, iniciamos a conversar hasta que quedamos en conocernos en persona, así que nos citamos en mi casa; cuando la vi no me parecía mala persona, porque me comenzó a mostrar fotos de sus hijos, hasta cuando me dijo que quería una cerveza, así que bajé a comprar, subí y yo serví, y a partir de ahí no me acuerdo de nada”.
Golpes. ‘Marco’ siguió relatando su historia y conversaba que cuando abrió los ojos se encontraba en el hospital y muy adolorido. “Los médicos me dijeron que llegué agonizando, ya que presuntamente me habían pateado y golpeado con un candado en el piso y que, posiblemente, me habían lanzado desde el segundo piso, por eso llegué rotas las costillas y mal con el pulmón”.
Precedentes. ‘Marco’ añadió que la denuncia estaba puesta en la Fiscalía, pero por cuestión dinero y tiempo no le dio seguimiento, y que ya se cumplía un año desde lo que le sucedió, pero quería sentar un precedente para que nadie más pase por estos problemas ni sean robados.A
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