¡Un docente está para enseñar, no para tocar!

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“Espoch libre de acoso” era la frase que se escuchaba a voz unísona afuera de las instalaciones de la Corte Provincial de Justicia, pues, los estudiantes superiores apoyaban no solo a una víctima, sino a otras alumnas que también habrían sido víctimas de un presunto delito contra la integridad sexual por parte de un docente de la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo. Por ello, con carteles, los decididos jóvenes acompañaban a sus compañeras durante la audiencia de flagrancia que se desarrollaba en el órgano de justicia. ¡Un docente está para enseñar, no para tocar!.

Antecedentes. ‘María’ (nombre protegido) narró: “hace cuatro años fui víctima de abuso porque nos besaba en el cuello, nos tocaba las nalgas, nos tocaba las caderas, y para él era normal, nos tenía con miedo. Esta situación se puso en conocimiento tras una denuncia a las autoridades, sin embargo, el personal no hizo nada, dejó archivar, perdió nuestras fotos, todos los vídeos que teníamos y, simplemente, dijeron que si no presentamos las evidencias dentro de los 90 días para la investigación… caso contrario no continuaría el proceso, y cansadas de esas respuestas dejamos de luchar”.

Situación. Alrededor de ocho chicas buscaron a ‘María’ (nombre protegido), y con temor escucharon lo que había pasado en 2018, pues les dijo: “si ustedes pasaron por estas situaciones, qué les voy a contar, solo muevan la cabeza, porque sé lo difícil que es pasar por esta circunstancia”; pero, luego, las compañeras empezaron a hablar sobre los abusos que también ejercieron sobre ellas”. Fue ahí cuando ‘Sofía’ (nombre protegido) expresó: “en una actividad que se organizó en un parque de la localidad tocó mis senos, siendo no solo la única vez, sino que en días posteriores acarició mis piernas sin mi consentimiento, generando incomodidad, inseguridad y miedo”, y en ese momento las chicas llamaron al Servicio Integrado de Seguridad ECU-911 para que detengan al presunto victimario, porque sabían que si volvían a denunciar en la universidad sucedería lo mismo que nos hicieron a nosotros hace cuatro años.

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Fue así que los servidores policiales llegaron a las instalaciones de la academia, lo detuvieron. “Con esta unión y levantamiento de nuestras voces sabemos que se sumarán más chicas por este mismo caso de años anteriores”, señaló ‘María’.

Detalles. El presunto victimario habría comentado que es esposo de una de las autoridades administrativas y que, seguramente, por esa razón no sucederá nada con él, manifestó una de las afectadas. “Por el apego a las autoridades se cree una persona intocable y no debería ser así, porque los estudiantes tenemos derechos y debemos ir a la universidad a estudiar sin miedo y con ganas, y esta persona nos ha puesto muchas trabas; hace cuatro años vivimos lo mismo y no tuvimos el apoyo de la institución, por eso no pudo continuar, si esto se hubiese frenado en ese tiempo, ahora no estaría sucediendo nada de esto; yo solo pido que se haga justicia y que no vuelva a pasar nunca más con ninguna estudiante, porque ya no pueden haber más mujeres víctimas”, solicitó ‘Fernanda’ (nombre protegido).

Suceso. Ernesto B., presunto victimario, fue privado de la libertad y trasladado al Centro de Detención de Contraventores, siendo en la mañana del 25 de enero llevado a la audiencia de delito flagrante y, al culminar este procedimiento, los estudiantes esperaban su salida por la puerta lateral, sin embargo, el supuesto victimario salió por la puerta principal, corriendo despavorido por la calle Primera Constituyente y, de un salto, logró entrar a un carro policial que lo esperaba para llevarlo; los manifestantes corrieron para alcanzar la patrulla, pero el sospechoso dejó el lugar. Posteriormente, los jóvenes se dirigieron al rectorado de la institución de Educación Superior y fueron recibidos por los funcionarios administrativos.

A saber. Luego de la audiencia se conoció que el ciudadano quedó en libertad por falta de elementos de convicción para quedar detenido, pero se le dictó medidas cautelares, a saber: presentarse una vez a la semana y no salir del país, además se dio medidas de protección como: no puede acercarse a las alumnas ni a la institución, y boleta de auxilio hasta la audiencia de juicio, que se realizará después de treinta días.

Pronunciamiento. Byron Vaca, rector de la Espoch, explicó: “se tomaron las siguientes decisiones, que son: dictar medidas de protección suspendiendo al presunto agresor y activar los protocolos de actuación en casos de violencia”.
Mañana más información…

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