¿Cuál es la percepción ciudadana que se tiene frente al caso del policía Santiago Olmedo? ¿Se tiene el pensamiento de que las leyes ecuatorianas están “a favor” de los delincuentes? El Súper Vecino, Luis González, responde a estas dudas.
¿Qué opina sobre la coyuntura en la que se ha visto envuelto el caso de Olmedo?
Sobre la cuestión del policía Olmedo, él estuvo cumpliendo con su trabajo, ¿no es cierto? Ahora, no estoy al tanto de lo que son las leyes del policía, o de las leyes penales, de las que se aplican. Pero, como veo en las noticias, el mismo Ministro del Interior, el que está hecho cargo, ha pedido que se revise esto. Porque, si él estaba cumpliendo con su misión, con su deber, no puede tener una pena. Eso es lo que yo podría decirle en el caso del policía, pero debemos poner atención porque un miembro de la Policía, que está cumpliendo con su misión, no puede pagar una pena de 13 años. Él tiene familia, tiene todo.
¿Usted considera, al igual que han manifestado algunas autoridades nacionales, que se está mandando un mensaje a los agentes del orden?
¿Usted considera, al igual que han manifestado algunas autoridades nacionales, que se está mandando un mensaje a los agentes del orden?
Aquí, efectivamente lo que hay que hacer es revisar la Constitución. Debemos darle un cambio total a la cuestión de la seguridad dentro de las Leyes de la Carta Magna. Esto porque, en otros países, en Canadá, si alguien no está al rango de cuatro menos, separado de la Policía, el policía le dispara. En cambio aquí, no creo que tengamos esa cuestión. Por eso es que hay una cuestión multiplicada de delincuencia en el país.
¿Está arrinconado el país con la delincuencia?
Más que eso, la delincuencia se ha tomado la Justicia. Entonces hay jueces, con los que el delincuente llega y a las 24 horas o 36 horas ya está nuevamente en la calle.
¿Esto le genera desconfianza en el sistema de justicia?
Hablando del caso de Santiago Olmedo
Hay que optar por tomar el ejemplo de lo bueno de otros países. A veces se toma lo malo, también. Por ejemplo, Singapur, tenía una cantidad donde estaban ya hacinados los presos. Y cambiaron las cosas. Ladrones, narcotraficantes, criminales, violadores y gente que robaba dentro de los Gobiernos, fue llamada y puesta al paredón. La gente tuvo que empezar a huir, sobre todo los políticos corruptos. Ellos salieron volando de ese país. Si regresan nuevamente, los atrapan y los mandan al paredón.
Entonces, yo creería que esa sería la solución, porque imagínese que en El Salvador hay un presidente que les cogió a los pandilleros y les está dando el trato que ellos deben tener. Con los Derechos Humanos no hay cómo hacerles nada, pero sí al que no comete nada y al que le matan. No hay un enfoque de derechos similar. Entonces, aquí ¿en qué se va a convertir? En una guerra en la que todos vamos a tener que estar armados. No es así. Hay que aprender de otros países, y hay que cambiar las cosas de la Constitución.
¿En qué se enfocaría?
Pena de muerte. Hay presos que están en la cárcel por cuatro, cinco violaciones y 20 asaltos. Creo que ya tienen hasta un historial de ocho veces de haber caído. Yo no estoy quitando la vida, ni soy Dios para quitar, peor para juzgar, pero así como tenemos derechos, también tenemos deberes. ¿No es cierto? Entonces, si cumplimos con las leyes vamos bien. Si no lo hacemos, lamentablemente, tenemos que pagar.
Desde el punto de vista ciudadano, ¿cree que existe respeto en la relación de ciudadanos y agentes del orden?
Sabe que, aquí en esto existe una falta de cumplimiento de las ordenanzas que tienen los Municipios.
¿Por qué?
Porque existe una ordenanza que dice que está prohibido consumir bebidas alcohólicas en la vía pública. Aquí, el policía municipal o el otro, ve que están tomando, en la avenida, y no les dicen nada. ¿Qué es lo que pasa cuando ya están en estado etílico?, ¿qué se empieza a hacer? Los bochornos, los asaltos, las violaciones, los robos y todo lo demás. Nosotros debemos cumplir las ordenanzas, las cuales hace el Municipio, porque las mismas no se hacen para que estén colgadas en una pared. Hay que socializarlas y, luego, de un cierto tiempo, hay que buscar que funcionen.