Launag Grande es una comunidad a 3.000mts. de altura en el cantón Chunchi y, allí, don Vicente Guadalupe Ortiz, presidente de la comunidad, empezó diciendo: “los maestros han sido la vida, nuestros programas siempre han estado siempre unidos al maestro de la escuela, por eso decimos que ‘llegó la alegría a Launag Grande’. Celebramos con música, con baile, y nosotros queremos que estudien. Han pasado 10 años y por fin se reabre la escuela, muchos niños en estos diez años dejaron de estudiar o se fueron de la comunidad”. “Llegó la alegría a Launag Grande”.
Es de anotar que la emoción invadió a la comunidad, pues, pasaron más de 6 años para que se reabra la escuela de la comunidad.
Mientras tanto, una mesa de gala se había colocado en la cancha principal; el mantel blanco, al ritmo del viento, parecía también celebrar la alegría de los habitantes de todas las comunidades aledañas a la escuela.
La directora zonal, Ximena Loroña, recibía los aplausos y los agradecimientos, mientras en el discurso indicó que el objetivo del Gobierno de Guillermo Lasso es abrir la mayor cantidad de escuelas, siendo la meta 1.000 escuelas, para una buena educación. “Tenemos que unirnos, gobierno con sus maestros, padres de familia con sus hijos e hijas, y por supuesto la comunidad”. Interactuó con los niños y niñas y junto a Shirley Criollo, directora de Riesgos, hizo el recorrido de las renovadas instalaciones de la Escuela “Eudoro Flores”.
Sin duda, el momento más efusivo fue cuando las autoridades y representantes de los padres y madres de familia, al son de la música y los aplausos, cortaron la cinta azul, en señal de que las clases por fin comenzaban, una escuela se abre y la esperanza llega, dijo una madre de familia emocionada.
Marcelo Paucar, director del Distrito “Alausí-Chunchi”, fue el encargado de enviar el mensaje a la comunidad, indicando que continuará “trabajando porque más escuelas del distrito se aperturen”, agregando que “cientos de niños y niñas van a tener la oportunidad de una educación de calidad, y cerca de sus hogares, sin sufrir riesgos, ni tener que retirarse por la distancia; la educación es un derecho, y estamos trabajando para que sea para todos y todas y de calidad”.
Flavio Ortiz, representante de los padres de familia, con palabras llenas de emoción, dijo que agradece a Guillermo Lasso por tener la voluntad de abrir la escuela, lo que tanta falta hacía en la comunidad.
La comunidad Launag ofreció a los presentes las tradicionales papas con cuy y el caldo de gallina criolla, propios de la generosidad de las personas de las comunidades. El baile y la danza se hicieron presentes con el grupo que llegó desde Huigra para esta fiesta por la educación. Una escuela que abre sus puertas es presente, es futuro, es cumplir con un derecho básico. A
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