Los vecinos de la parroquia Licán, perteneciente al cantón Riobamba, no han tenido un buen feriado. La noche del domingo, las fuertes lluvias terminaron por afectar la tubería de agua potable, lo que ha provocado que este territorio se quede sin líquido vital. Fuertes lluvias afectaron la tubería.
Información. Diego León, presidente de la Junta Parroquial, dio a conocer que el invierno les ha pegado muy fuerte. “Nosotros traemos el agua potable desde la parroquia San Juan y es ahí donde la tubería matriz, ubicada en el filo del río, ha sufrido daños considerables”, comentó el funcionario, quien agregó que por las lluvias, el río ha crecido mucho, se desbordó, y esto generó que dos captaciones resultaran destruidas en su totalidad y en otra parte la tubería fue arrastrada.
Realidad. León aseguró que les es imposible ingresar, por lo que se requiere de maquinaria pesada. Como una medida alternativa, se trabajaba en la opción de contratar tanqueros para abastecer con líquido vital a los diferentes barrios de la parroquia Licán. “Hemos hecho el llamado a la Emapar (Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Riobamba) y todavía no nos contestan (09:00 h de ayer). Esperamos que nos puedan ayudar, sobre todo porque al estar en un feriado, la situación se complica aún más”, comentó. Las tuberías estaban enterradas, pero ahora, con la crecida, se han registrado estos problemas.
Consecuencias. En la parroquia Licán, cuando llueve, se suelen registrar inconvenientes como inundaciones, colapso de alcantarillas y más, y eso sucede desde hace varios años, sin embargo, cuando se suscita la emergencia, acuden representantes de todas las instituciones, charlan y proponen, pero luego, todo queda en nada, añadió León.
“No nos han dado una solución definitiva en lo que es la quebrada de Cunduana. Eso perjudica la vialidad y la calidad de vida de los ciudadanos”, dijo, por eso hizo un llamado para que de una vez por todas se tomen decisiones que solucionen estos problemas.A