Feria de Guamote: “Hemos pasado duros momentos, el hambre no espera, las deudas, además nuestros hijos estudian. Las actividades comerciales durante la pandemia se han visto afectadas, sin embargo, nosotros hemos tenido que seguir adelante con nuestras ventas, ya que nadie nos va a dar un solo centavo; estos políticos de ahora solamente piensan en sus bolsillos, poco o nada salen al campo a ver la cruda realidad del productor, del agricultor”, comentó enérgico Segundo Chicaiza, vendedor de la feria.
Mercados. Las actividades comerciales en los mercados del cantón Guamote se llevan a cabo con total normalidad. En el sitio se puede evidenciar que a la entrada existe un arco de desinfección que ya no funciona y en los mercados la gente no respeta el distanciamiento social. Guillermo Gadvay, comerciante, afirmó que ya no depende de ellos, sino de la gente que va a comprar. “Imagínese, nosotros no podemos presionar a la gente para que se separen, aquí nosotros venimos con nuestras ventas sin hacer daño a nadie, pero con miedo también de que nos podamos contagiar de ese virus, que han dicho que aunque estemos vacunados igual nos puede dar; no ve ahorita, están vacunando por allá y la gente se amontona aquí, eso es un problema porque es un grave daño para todos, pero si vivimos con miedo ya nos habríamos muerto, pero lo único que queda es seguir adelante, porque nada es gratis en esta vida”, acotó el vendedor.
Normal. Luis Zurita, vendedor de fritada, quien realiza dicha actividad desde hace más de 20 años, manifestó que la feria se ha mantenido a pesar de las restricciones. “Yo empecé desde los 25 años a vender; esta actividad es con la que yo sobrevivo y doy de comer a mi familia; vengo de la comunidad Chacaz los días jueves y, de esta manera, sostengo a mi familia; la feria se desarrolla con normalidad, la gente sigue viniendo normalmente”, refirió.
Control. Para Samuel Rivera, ciudadano coltense, subraya que siempre ha faltado control en los mercados de Guamote. “Yo vengo siempre a comercializar mis productos en esta localidad, pero siempre ha sido todo desorganizado; aquí, desde el tránsito, las calles son muy pequeñas y no hay quién de paso, los vivos de los camiones dejan por todos lados los carros mal parqueados, es peligroso pasar, a más de eso la gente camina por todos lados y uno que viene con carro tiene que estar con cuidado, porque van en media calle, pero es ola culpa de estos señores de los carros pesados, porque ellos hasta en las veredas se suben y no están viendo a nadie. Creo que sí faltaría un poquito más de control en ese aspecto del tránsito”, adujo el comerciante coltense.
Ventas. El vecino además afirmó que donde venden los animales no existe para nada distanciamiento. “No hay control aquí, en el lado de los animales todo es insalubre, eso deberían ver, porque a parte de tener todo hacinado a los animales, la gente se aglomera, ¿qué distanciamiento social va a ver?, cuántas personas que vienen a comercializar productos y animales en este sector e incluso pasan sin mascarillas, no me parece justo aquí es tierra de nadie”, dijo Rivera.
Opiniones. Varias son la opiniones en torno a como se desarrollan las cosas en la feria, para los comerciantes las actividades que realizan son necesarias para llevar el pan a la mesa de sus familias, para los compradores la realidad es otra, y aducen que necesitan abastecerse de los alimentos para poder sobrevivir. Los visitantes que van al cantón sugieren que falta más control por parte de las autoridades, ya que no existen en lo más mínimo medidas de bioseguridad entre las personas que compran en los mercados, y eso resulta un peligro para la salud de todos los habitantes.
Control. Se pudo evidenciar además que no existía en el lugar ninguna clase de control por parte de la fuerza pública durante las horas de la mañana.
Mercado. Según María Chariguamán, moradora de una comunidad cercana, quien realiza sus compras en la feria, dijo que siempre ha sido así el mercado y que no le sorprende que las actividades se realicen de la misma forma, como ha sido durante años. “La feria siempre ha sido así, la gente viene honradamente a realizar sus ventas; yo creo que no se está haciendo nada de malo, creo que cada uno ya debe cuidarse como pueda, es que debe darse cuenta que no hay policías para que estén atrás de cada individuo, ya los irresponsables que no se lavan las manos ni usan mascarillas son los que pasan mal; uno no tiene la culpa de los malcriados, que en su mayoría son los jovenes que vienen sin oficio ni beneficio”, enfatizó.