Cuando por las tardes -en Riobamba- suena el silbato del tren, más de una persona, desde donde esté, busca las rieles para observar el paso del “gigante de hierro”. Ipso facto, los corazones laten y las emociones fluyen. Y cuando el ferrocarril llega a la Estación de Riobamba también no falta gente que va a observar de cerca las locomotoras, y es que para la “Sultana de los Andes”, Alausí y Chimborazo este patrimonio es parte de su historia, de su realidad, de su grandeza. Sin embargo, el gobierno decreto que 10 empresas públicas se cierran por la emergencia sanitaria entre ellas se cierra la Empresa de Ferrocarriles del Ecuador.
Caso. Y esa es la razón para que -luego del anuncio del cierre de la Empresa de Ferrocarriles del Ecuador- haya mucha preocupación desde las autoridades hasta sus trabajadores y empleados, porque lo único que se sabe es que esta institución se cierra, pero no se les ha dado a conocer absolutamente nada más. Por las calles de la “Sultana”, se realizó una marcha por parte de los ferroviarios, quienes, con cartel en mano, recordaban que el tren es un patrimonio de la provincia y que no se debe permitir su venta, sino, por el contrario, se debe estructurar su defensa.
Patricia Miñaca, empleada de la empresa, comentó que -hasta ahora- no tiene una idea clara de lo que va a pasar. “Un día nos dijeron una cosa, y al siguiente salió el decreto que nos parece la última opción que se puede tomar, porque Ferrocarriles del Ecuador, como empresa pública, como atractivo turístico a nivel nacional e internacional, tiene muchísimas ventajas de las que se podría sacar provecho y, de esta forma, sacar adelante el turismo de Chimborazo y nuestro país”, comentó.
Ingresos. Cabe destacar que la ocupación hotelera en toda nuestra provincia depende en un 50 por ciento del tren, ¿Qué va a pasar con el ferrocarril de Chimborazo, sus instalaciones, las locomotoras y el turismo que éste genera? Es una de las preguntas que se hace la mayoría de personas que hoy salieron a protestar, tomando en cuenta que para la provincia el tren sí es sustentable.
Recorrido. Los ferroviarios caminaron desde la Estación del Tren hasta los talleres, y allí abrieron las puerta de uno de los lugares donde se guarda a uno de los tesoros del Ecuador: la locomotora 45. Los trabajadores se colocaron alrededor de ella, con banderas del Ecuador en la una mano y la otra levantada como símbolo de lucha, mientras se tocaba su inconfundible e inmortal silbato.
Intervención. Christian Tamayo, gerente de la Filial Sur de la Empresa de Ferrocarriles del Ecuador, comentó que el escuchar el silbato del tren causa mucha emoción y, con lágrimas en sus ojos, pidió que se permita avanzar unos cuantos metros a la locomotora. Varios ciudadanos, al escuchar de manera insistente el silbato del tren, ingresaron al taller. “El tren es nuestro, es Chimborazo. ¡Por favor! ¿Qué nos están haciendo? ¡Es nuestro patrimonio, nuestra historia, es parte de nosotros! ¿Se la va a vender? ¡No hay que permitir que se lo deje morir! ¡Riobamba y Chimborazo no deben permitir que dejen morir a nuestro tren, peor que se venda a extranjeros!”, dijo Jorge Leiva. Según se conoce, este tipo de protesta se está desarrollando en varias de las estaciones en el país, como la de Chimbacalle, en Quito.